China es inmenso, repleto de personas un lugar en el que las leyes se cumplen y cualquier crimen es penado de manera severa, a pesar de ser un lugar casi perfecto aun existen lugares en donde romper la ley es algo mas como un entretenimiento.
En la...
La noche era fría y lluviosa, en una solitaria carretera un moto corría a toda velocidad, sobre ella dos amantes los cuales solo ansiaban ser libres, libres de tanto odio pero sobre todo libres para amarse, dos jóvenes que no habían pedido nacer en medio de un mundo de guerras y que no tenían el control sobre sus sentimientos, el chico que iba en el lugar del pasajero dio un leve golpe en el hombro del conductor para que este se detuviera, la moto desaceleraba y se aparcaba a una orilla de aquel lugar, el pelinegro tomaba el móvil en sus manos mientras que una mirada triste se reflejaba.
- ¡Es papá!...otra vez...
Los ojos de Zhan empezaron a llenarse de lagrimas mientras Yibo lo veía con tristeza, ambos se abrazaron buscando consuelo preguntándose ¿Por que tenia que ser así? dejar a sus familias y seres queridos atrás solo por el hecho de que estos no les permitían amarse correctamente, Yibo tomo el rostro de Zhan con suavidad y regalandole una tierna sonrisa beso sus labios, a pesar de todo estaban juntos y esto era lo que mas anhelaban, el pelinegro sonrió y asintió, ambos de nuevo tomaban aquella oscura y solitaria carretera.
Era casi el atardecer cuando finalmente los amantes arribaron a su destino, se encontraban en Hunan una de las ciudades vecinas de ChongQing justamente en el pueblo de Feng Huang, un pueblo antiguo y costero donde la población era poca pero las personas vivían su día a día de manera tranquila sin fijarse en los demás, Yibo consiguió dar con aquel lugar gracias a uno de sus mas fieles amigos, este le prestaba una cabaña familiar para que estuvieran allí el tiempo necesario, también se había ofrecido a guardar el secreto de su paradero.
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Los amantes entraban a aquella cabaña en silencio, observando todo a su alrededor, sin esperarlos en aquel momento sus corazones estaban tranquilos y aliviados, Zhan camino por el lugar y coloco sus pocas pertenencias sobre un sofá para luego girarse hacia Yibo quien lo veía fijamente, los ojos del pelinegro seguían llenos de lagrimas pero en sus labios una sonrisa se dibujo y extendiendo sus brazos corrió hacia el amor de su vida arropándolo, los brazos de Yibo se envolvieron en el cuerpo del pelinegro y lo sostuvo con fuerzas, entregando un beso en su hombro, por fin estaban lejos y lo estarían mas en cuestión de días pues Yibo estaba haciendo los arreglos para no solo alejarse de aquella ciudad la cual les trajo dolor sino de aquel país.
- Todo va a estar bien...- Zhan beso sus labios.- Ahora esta es nuestra vida...sin ningún miedo...ni venganza...vamos a dedicarnos a ser felices...prométeme que nunca miraremos atrás...
- ¡Lo prometo!...- Yibo sonrió y beso sus labios.- Debo ir a preparar la habitación para ti...- Pico su nariz.
- ¡Dormiré contigo!...- Zhan sentencio y luego se sentó en el sofá viendo a la nada.
- ¿En que piensas?...- Yibo se sentó a su lado.
- Estoy pensando...- Zhan arqueo una ceja.- Que por suerte...no podemos tener hijos...porque entonces...¿Que serian?...¿Wang o Xiao?.
