(Alto's Adventure - Far Away on a Snowboard Es solo una Historia/Fanfic de una posible historia del juego según la mente de un jugador.Siempre Respetando la historia ya otorgada en el juego original.)
Alto ha escuchado hablar acerca de los poderes d...
De vuelta de mi paseo en Snowboard, fui de vuelta pueblo rápidamente para que nadie se diera cuenta o me metería en problemas, en muy graves y serios problemas. Así que intenté llegar a tiempo, el sol ya estaba saliendo y esa era mi señal para saber que los demás aldeanos empezarían a despertar, me apresuré, En la entrada a la aldea se encontraba Maya, mi vieja amiga, he pasado casi toda mi vida junto a ella lo suficiente como para saber que aunque me viera en las montañas viniendo de una tarde en el Board no le contaría a nadie nunca porque como toda buena aldeana del pueblo sabe todo acerca de este y de las consecuencias que me traería que se enteraran. Maya me esperaba con su cena claramente fruncido aunque se notaba que trataba de disimularlo , ella es famosa por su ceño fruncido, la hace ver muy graciosa y adorable. Subí la ultima pequeña colina a pie y me acerque a Maya, Traté de disimular que no veía el enfado en su rostro. Entonces con la voz algo callada para no despertar a los demás ya que yo llevaba la tabla de Board en la mano. Para apresurarnos un poco más decidimos hablar mientras caminábamos, Así me que dijo..
- Vienes tarde..
- Oh vamos.. el sol apenas y se ve, vine lo más rápido que pude.
- y que si los aldeanos si hubieran despertado antes hoy!
- Shhh.. No alces la voz Maya, no ves que la idea es mantenerlos dormidos un poco más.
- Disculpa pero no fui yo quien quiso ir se a esquiar a las 6:00 am.
Me quedé sin que decir por un momento así que el ambiente se sentía algo incómodo, asi fue el silencio hasta que con la cabeza algo baja me preguntó..
- ¿No pasaste al St Anton, verdad Alto?
- ¿Qué? pero claro que no, no soy un suicida o algo así Maya.
El St Anton es un área más ayá de las colinas, valles de nieve y área segura, es lo que divide al Pueblo Bouvó de las fronteras, Muchos turistas y amantes de esquiar vienen al St Anton seguido por sus montañas altas y profundos cañones a la distancia, siempre he querido ir pero eso ya sería demasiado por ocultar, no habría una manera de justificar el hecho de que me tuviera que ir tan lejos. Fuimos a nuestras carpas para fingir que no habíamos salido de ahí desde la noche anterior. Dormiría tranquilo sabiendo que todo iba bien asta hoy y que cuando yo creciera un poco más seria capaz de tomar mis propias decisiones y que la fronterase quedaría ahí esperandome. O bueno... eso creía yo.
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