Mamá a los 16 "Mi Cielo"

19.-Nuevo inicio

Han pasado ya 5 meses desde que paso lo del episodio con Ignacio, Diana y yo, hablamos con Valentina, nos vinimos a vivir con ella, ahora estoy en Londres, mamá nos trata con mucho cariño, Diana y yo nos acercamos mucho y dejamos el pasado atrás, mi pequeña ya esta grande, Sergio viene en unos meses, para mudarse con nosotras, vendrá con su familia, Samantha, Oliver, Diana y yo somos muy buenas amigos.

[TRES AÑOS DESPÚES]

-Buenos días mi princesa- digo entrando a la habitación de mi pequeña.

-Mami- dice Alessandra estirando sus brazos para que la cargue.

-¡Vamos! Levante, ya es hora de ir al nido, mi amor- digo mientras la cargo y nos dirigimos a su baño.

-Mami- dice poniendo una carita de cahorrito con un puchero, todo lo que le enseña Samantha -Me lele mi pazita- no puedo evitar reír, es gracioso como intenta decir las palabras pero aun no puede pronunciarlas bien.

-¿Le duele la barriguita a mi princesa?- digo agarrando sus cachetes y dejando un beso en su nariz.

-Ti- responde ella.

-Anda flogilla, no puedes quedarte en casa, ¿Acaso no quieres ir a ver a tus amiguitas del nido?, además no habrá nadie en casa, papi llega hoy de viaje y después ira por ti al nido, ¿No quieres que papi vaya a recogerte?- digo mientras aún la tengo en brazos.

-Ti quedo- dice con una tierna sonrisa.

-Entonces vamos a alistarte, que ya se nos hace tarde- le hable bajándola de mis brazos.

-Ti mami,  ponme monita- me rio y  en vez de sentirse mal Alessandra rie conmigo.

Después de reír, la lleve a darse una ducha de agua tibia, le puse un oberol color rosa palo de tela jean, un polo blanco, unas zapatillas del mismo color que el polo y le hice dos trenzas que empezaban desde arriba de su cabezita, luego de alistarla bajamos a la cocina.

Le prepare el jugo de fresas con leche que tanto nos gusta a las dos, y unas tostadas con merengue, la senté en la mesa, y se lo di.

-Mamá ira a cambiarse para la oficina espera aquí no te vallas a mover, ¿Si mi amor?- digo mientras ella se acomoda en la mesa y le acomodo su babero.

-Ti mami- responde ella y le deposito un beso en su frente.

Subí a mi habitación, me coloqué unos pantalones blancos para la oficina, una blusa rojo con escote recto, y unos tacones blancos, me hice un moño elegante, después fui por unos papeles que tenía que llevar a la empresa de mi madre, cuando baje a la cocina Alessandra ya se habia acabado su desayuno y tenia la cara machada igual que su babero, como siempre.

-Deberíamos hacer una competencia para saber quien se ensucia mas al comer- rei.

Ella río también, la saque de la mesa,  la ayude a lavarse los dientes y la lleve al nido.

-Bueno cariño, portate bien, no vallas a hacer travesuras, papi vendra por ti, y yo los esperare en la oficina para irnos luego a almorzar- digo poniendome a la altura de Ale mientras le acomodo la ropa.

-Ta yen, Ayiosh mami- dice mi pequeña dejandome un beso en la frente.

-Que tengas un buen día- digo.

Se la di a su maestra, la agarró de la mano y avance para el coche, pero gire antes de que ella entrará a su aula.

-Alessandra- grite y ella voltio a verme -Te amo- dije sin sonido pero tratando de que ella me entendiera.

-Yo más, mami- dice ella abriendo la boca de forma exagerada provocandome una sonrisa.

Ella me lanzo un beso, y yo hice como que lo atrapé, le lance otro, y ella también lo atrapó.