He says [VHope]

Capítulo 9

Una nueva semana daba comienzo en la Universidad Deportiva de Seúl.

Era hora del almuerzo, y para su suerte ese día de la semana que podía compartir la hora de la comida con sus amigos. Lo único que esperó que jodiera su día era TaeHyung viniendo en paquete con NamJoon o YoonGi, porque definitivamente no podría soportar la tensión por mucho tiempo, sumándose a esto, él no era para nada bueno controlando y disimulando sus sentimientos, lo que haría sospechar a sus amigos —siendo lo último que necesita en el desastre que se estaba convirtiendo su vida—.

Si la vida de Jung HoSeok estaba plagada de problemas y dudas antes, la llegada de TaeHyung aumentó de forma considerable la —generosa— cantidad que ya tenía.

Hoy el karma estaba de su lado, así que el peligris no había llegado a la mesa, de hecho, a penas lo vió entrar con YoonGi y NamJoon, les dijo algo y se fue directo a la mesa donde estaba el equipo de básquet.

Por otra parte, además de contener emociones negativas en su menudo cuerpo, no había dejado de tratar de recordar todo lo que pasó después de la gran cantidad de alcohol que tomó en la fiesta del sábado.

De todas formas, todo se tornó bastante confuso cuando llegó a sus oídos por bocas ajenas de sus compañeros de clase que el peligris no había tomado ni una sola gota de alcohol en toda la noche y que había sido consciente de cada cosa que pasaba a su alrededor.

HoSeok quería creer que TaeHyung no había hecho nada mientras estuvo inconsciente, y saber que había estado sobrio le daba un poco de esperanzas y le brindaba más credibilidad a su explicación del por qué él había amanecido casi desnudo en su departamento y en su cama.

—Todavía no puedo creer que te hayas acostado con el tal Park JiMin, que conoces hace tan solo una semana —comentó, atónito YoonGi, mientras agarraba un poco de arroz y verduras con sus palillos—. Eres rápido, mocoso. Ni siquiera conmigo fuiste tan rápido.

—Él es muy lindo, agradable y atractivo, ¿bien? Además ambos estábamos muy borrachos, con tanta química que tenemos era inevitable que pase. Aunque debo admitir que me sorprendió un poco verlo en la fiesta. La próxima vez que salgamos le preguntaré —JungKook se encogió de hombros, con una sonrisa—. Contestando lo otro: ¿cómo íbamos a hacerlo rápido? Tú te rehusaste a ser el de abajo, hyung —respondió a su acusación el menor, apuntándolo con el dedo índice y sus ojos entrecerrados.

—Oh, Dios. Cállense, no quiero escuchar cómo fue que follaron la primera vez —pidió un NamJoon asqueado por la conversación—. Ah, y ¿JungKook? —llamó al menor, este lo miró—. JiMin es el mejor amigo de TaeHyung-ah. Deberías saberlo, ya que mi primo no es de tu agrado.

Ahora todo encaja, pensó HoSeok.

Una de sus muchas interrogantes fue la presencia de JiMin en el departamento de TaeHyung cuando se despertó.

—¿Estás bromeando? ¿Cómo puede JiMin ser amigo de alguien como... Kim? JiMinnie hyung es muy bonito, maravilloso y TaeHyung tan él —dijo despectivamente.

—No hables así de él, JungKook. No sé qué es lo que pasa entre ustedes, pero agradecería no ser el chivo expiatorio o estar entre medio de sus problemas —habló de forma tranquila.

No era cualidad de NamJoon formar parte de conflictos.

—¿Tienes riña con Kim? Vaya, no lo esperaba. Ya sabes, aquí los prodigios siempre se llevan bien entre ellos. Tú prodigio en fútbol y él en básquet —articuló el mayor de los cuatro presentes. YoonGi hizo una mueca, como si estuviera pensando—. Ah, ya sé, puedo adivinar... ¿Qué le hizo TaeHyung a HoSeok?