Cada Lunes (-SarawatTine)

12

Sin intenciones

Parte doce
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Sarawat lo miró inexpresivo y luego asintió levemente

—No se, nunca nadie me ha probado pero...Puedes ser la excepción Tine.

—¿Eh?

¿¡Acaso me pidió hacerlo con él!?

—¡Pedazo de idiota, no digas esas cosas aquí!

Sarawat tan sólo comenzó a reír

—Es obvió ¿No? 

—¿Que es obvió?

Ahhhhh.

Estoy tan sonrojado y avergonzado.

—Que soy millonario.

Tine frunce un poco el ceño.

—¡¿Entonces por que pides que te pagen antes de salir contigo!?

Sarawat lo mira fijó

—Tengo que tener algo con que desquitar.

—¿A que te refieres?

—Púes que tengo que ganar algo, ellos ganan salir conmigo y yo ganó dinero.

—Eso suena como prostitución...

Sarawat casi se atraganta con el vino

—No... No lo hagas parecer eso...

—Ok..

Sarawat vuelve hablar mientras tomaba los cubiertos de la mesa

Tine lo miró con una sonrisa.

—¿Acaso no prestaste atención a mi casa?

Tine hace memoria y ahora que recuerda ni miró

—No... No me fijó en esas cosas.

—Es que tu eres tan bueno, tan noble.

Al acabar de comer Sarawat se ofreció a llevarlo a otros lugares

Iba manejando y entonces paró a un lado de un callejón

¿Por que siempre los callejones?

¿Algún problema con ellos Sarawat?

—¿Quieres ir a otro lugar? Un lugar divertido.

—Si, pero que sea un lugar normal donde no esté rentado por ti.

—Claro.

—Pero tu ropa...

Sarawat se quitó el sacó y comenzó a desabotonarse la camisa

A lo que Tine comenzó a gritar mientras cubría sus ojos 

—¡Mis ojos, Mis ojos, cubrete Cochino!

Sarawat seguía debsabotonando la camisa y cuando término se la lanzó a Tine en la cara.

—¡AHHHH!

—No abras los ojos aún, sigue mi pantalón.

Dijo este colocandose una playera

Tine estaba temblando

—Al único que he visto es a P' desnudó.
—Estoy empezando a odiar a P'

Tine cerró los ojos aún mas fuerte pues escuchó como el cierre de Sarawat era bajado.

—Acaso no tienes miedo de qu-
—Callate o te lo voy a meter en la boca.
—¡AHHHHH!
—Él zapato.

Sarawat creyó que jugarle una broma a Tine sería divertido.

Si, lo era.

—¿No quieres tocar? No tengo el pantalón aún

—¡No, No, No, No!

—¿Seguro? Serías el primero.

—¡No!

—Bueno.

Sarawat se cambió el pantalon al igual que los zapatos.

—Ya puedes abrirlos.

Lentamente Tine abrió los ojos y vio que Sarawat tan solo lo miraba esperándolo

—Continuemos.

Siguió manejando hasta llegar a un lugar llenó de estanterías de videojuegos y pantallas para jugarlos.

—Dios... No sabía que esto existía aquí.

Dijo Tine asombrado.

Era su primera vez en ese lugar.

—Ni yo, hasta hace una hora.