call me daddy 2

Capítulo 14

Pasé horas llorando en mi dormitorio solo. Mi cara estaba aplastada en una almohada y mis lágrimas estaban empapadas en la tela reconfortante. Lo dejé salir todo, todo se esforzó fuera de mi cuerpo. Todo mi dolor, tristeza y esperanza estaba siendo dejado ir.

Tuve que enfrentarme a la realidad. Tenía que enfrentarse a la realidad. Estábamos diecisiete años separados. Yo tenía dieciocho, él treinta y cinco. Ya tenía su familia, y yo ni siquiera era lo suficientemente maduro o lo suficientemente maduro como para tener la mía.

Me sentí estúpido. A través de toda la discusión con su ex esposa y los gritos de mi ira hacia Harry, sentí que no encajaba. Para ellos, estaba haciendo un berrinche y actuando como un mocoso. Pero para mí, me dolió el hecho de que el hombre que amaba no podía admitir sus sentimientos porque estaba avergonzado o asustado de lo que la gente pensaba. Eso me mostró que no estaba listo, y eso me destrozó.

Voy a extrañar tanto a Sydney y A Oscar. Tal vez me tope con ellos en un parque en el futuro y ellos serán capaces de decirme lo bien que están y lo mucho que me extrañaron también. Estaba pegado a esta familia y ahora estábamos separados.

Mi teléfono atravesó mi bolsillo y apenas pude oírlo hasta que mi llanto se calmó un poco. Por supuesto, fue Harry. Ignoré su llamada, y la de después de eso, y la de después de eso.

Gruñé airadamente cuando llegó un texto, haciéndome caldear duramente a mí mismo mientras limpiaba una lágrima varada. Respiré hondo, agarrando mi teléfono para ver lo que se ha enviado.

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Contesta tu teléfono, Mia. No tienes idea de lo mucho que significas para mí. Lo siento mucho, nena. No seas así. te amo.

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Me fruncí y bloqueé su número inmediatamente. Estaba tan enfurecido por él, que nunca supo cuándo era suficiente. Terminó las cosas hace un año, debería haberlo dejado así. Ahora es un ciclo de repetición y me queda manejar la ruptura del corazón.

Pero entonces mi teléfono sonó de nuevo, y me volteé. Se tituló 'Harry teléfono de trabajo', tuvo que parar. Lo colgué después de pasar tres anillos. Tuve que demostrar que no estaba tomando esto.

Pero luego tuvo que enviarme un mensaje.

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Sandra se ha ido. Se fue hace diez minutos y probablemente no regresará. Por favor, vuelve, te quiero tanto. No puedo hacer esto sin ti. No me ignores.

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No entendía por qué estaba tan enojado. No escuchó lo que dije antes de irme. Necesitaba dejar pasar esto y yo también. Iba a decir mis últimas palabras y luego bloquear su número.

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Lo que tuviéramos nunca iba a funcionar. Tienes una vida completamente diferente a la mía y tienes treinta y cinco años. Eres un padre soltero divorciado y yo estoy en la universidad tratando de obtener una educación. Solía pensar que no importaba, pero si estás demasiado asustada para admitir que estás enamorada de una universitaria, ¿por qué debería seguir contándome a mí misma que lo que tiene está bien? Si no puede sin suadmitirnos, entonces admítelo; nunca funcionará a menos que aprendas a no preocuparte por lo que la gente piensa. No me llames ni me envíes un mensaje de texto ni trates de contactarme de ninguna manera. Estoy bloqueando este número.

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E hice lo que prometí y me aseguré de que no pudiera llamarme nunca más.

Me dolió, pero estaba odiando.

Antes de darme cuenta había pasado una semana. Era a medio plazo y todo lo que tenía era un montón de trabajo inacabado que nunca me molesté en completar porque estaba demasiado ocupado estar con Harry y los niños. Lo que más me dolió fue que no sólo estaba enamorada de Harry, estaba enamorada de Sydney y Oscar. Estaba enamorada de la idea de pasar mi vida con ellos. Estaba enamorada de la idea de ser su madre.