➥ANOTHER LOVE [ Tim J. Drake x OC ]

⇝ＴＲＥＣＥ⇜

❝ 𝚓𝚞𝚗𝚝𝚘𝚜 𝚍𝚎 𝚗𝚞𝚎𝚟𝚘 𝚢 𝚙𝚊𝚛𝚊 𝚜𝚒𝚎𝚖𝚙𝚛𝚎 ❞

Residencia de los Rodríguez, Gotham City
Miércoles 3 de febrero de 2021
7:05 AM

𝕍𝔼𝔼ℕ𝕌𝕊

NO PUDE DORMIR por lo que no fue un horrible sufrimiento levantarme cuando la alarma sonó.

Me quedé unos cinco minutos sentada al borde la cama, tratando de borrar los recuerdos de la discoteca. Me pasé las manos por la frente y el pelo para despejarme un poco cuando recordé que algo rodeaba mi muñeca.

Era una preciosa pulsera con nuestras iniciales. Los recuerdos borrosos de Siren's me abandonaron para proyectar los del coche.

Hoy sería el gran día.

Me duché y vestí con el uniforme. Me maquillé muy ligeramente y bajé las escaleras con un poco de miedo.

Tim les habría contado lo que le dije que ocurrió y yo no estaba segura de lo que le dije, estaba en serios problemas.

En la mesa de la cocina estaban todos. 

— ¡Vee! —exclamó Liv.

Maldije en bajo al ver que los dos adultos, con ojeras igual de grandes que las mías, giraban sus cabezas hacia mí. Besé en la mejilla a la pequeña y me senté en la mesa.

—Vee —me llamó Eva.

—No quiero hablar de ayer —admití interrumpiéndola.

Ella asintió. Víctor se mantuvo callado durante todo el desayuno, mantenía una expresión preocupada.

La hora de irse llegó y corrí a la salida gritando una despedida.

En el coche blanco de Caleb estaban todos, menos Alvar. Suspiré aliviada y me metí.

— ¡Hey! ¿Qué te pasó? Desapareciste con Alvar durante horas —exclamó Natalie. Ella iba en el copiloto.

Me removí incómoda sintiendo el momento de nuevo. Tragué saliva con las lágrimas a punto de salir por mis ojos.

—No quiero hablar de Alvar —declaré tajante.

Todos se miraron. Querían preguntar, pero sabían que sería entrar en un terreno peligroso.

Caleb arrancó el coche sin rechistar.

No fue hasta la cafetería que volvieron a meter a Allard en la conversación.

— ¿Pasó algo malo? —preguntó por decimoquinta vez Diego.

—Si es así, le arrancaré la cabeza —alcé una ceja hacia su dirección. No era por nada, pero Allard tenía mucho músculo y Caleb, bueno, no mucho—. Tim me apoyaría —murmuró en bajo.