20.-

26 5 3
                                    

Agradezco a @Mai13_75 por estar votando últimamente y recordarme que tengo un fanfic. <3

———————————————————————————
Me separo de sus labios estando más tranquilo que antes. Me mira a los ojos y veo en ellos ese brillo que me fascina, esa calidez que me tranquiliza.

- Todo estará bien, ¿de acuerdo? Vas a estar bien -. Dice Miguel mientras toma mi rostro entre sus manos.

- Vamos a estar bien -. Le corrijo yo. Porque si quiero estar bien sé que es con él mi lugar de paz.

- Vamos a estar bien -. Repite él, con una sonrisa.

Y por ese pequeño instante, supe que así sería, pero ese instante no duró mucho.

- Miguel, tu novia está loca -. Se abrió de golpe la puerta, dejando ver a Luzu un tanto exaltado.

- Luzu, ¿que ha pasado? -. Preguntó Miguel levantándose de un golpe. Había olvidado el hecho de que no podían vernos así.

- Miguel, la policía está aquí, Beatriz te ha reportado por sospechas de que tienes una relación con uno de los pacientes -. Dijo mirándonos a ambos continuamente.

- ¿M-Miguel? -. Dije yo en un murmullo, asustado, volteé a ver a Mangel que estaba perdido en sus pensamientos; no quiero que metan a Miguel en la cárcel por mi culpa.

- Tranquilo, Rubén, no te preocupes, todo estará bien -. Dijo agachándose junto a mi, tomando mi mejilla con una mano, acariciandola suavemente. Y otra vez, su tacto me tranquiliza.

- Mangel, no tenemos tiempo para esto, vienen a tu oficina, no te pueden ver así con él -. Dijo Luzu desesperado.

- ¿Y que se supone que haga? -. Miguel se incorporó quedando frente a frente con Luzu.

- Miguel, sabes bien que se quedarán unos días para evaluarte, creo que comienzo a entender esto que tienes con Rubén, pero si sigues así, mientras ellos estén aquí, vas a ir a la cárcel, Mangel -. Dijo Luzu, viéndolo directamente a los ojos, entiendo su conexión. Son casi como hermanos de otra madre, me alegro que Lanita tenga a tan buen chico a su lado.

- De acuerdo, entonces, ahora que vengan, Rubén, tú y yo no tenemos nada que ver, ¿si, lindo? Entiendo que estes asustado, tanto como Luzu y yo o incluso más, pero tranquilo, esto solo durará unos días, después podremos volver poco a poco a la normalidad. Necesito que nos distanciemos mientras ellos estén aquí. ¿Si, lindo? -.

Yo solo atiné a asentir, la simple idea de alejarme de Miguel me asusta, él es el único que ha sido capaz de ahuyentar a Ust. Es por eso que no puedo permitir que se lo lleven de mi lado.

- De Beatriz me encargaré luego -. Dijo Miguel dirigiéndose a Luzu. - Mientras tanto nos quedaremos aquí, como terapia normal, Luzu, te pido que estés aquí para cuando ellos lleguen y digas que estás supervisando el progreso porque eres uno de los enfermeros más avanzados y debes llegar a conocer a los pacientes más a fondo -.

- De acuerdo, tranquilo Mangel, todo estará bien, y chicos... -. Ambos volteamos a verlo. - Felicidades -. Dijo sonriendo, Miguel le correspondió la sonrisa y yo solo atiné a sonrojarme. En ese momento abrieron la puerta.

- ¿Miguel Ángel Rogel? -. Preguntó un hombre, mostrando su placa a Miguel, entró a la oficina seguido por otros dos, que evaluaban todo con la mirada.

- Soy yo -. Dijo Miguel acercándose a él.

- Me han informado que no está cumpliendo con su deber de la manera apropiada -.

- ¿A qué se refiere? -. Pregunta Miguel incrédulo.

- Se rumora que está teniendo una relación más íntima de lo normal con un paciente, ¿es eso cierto?-.

- No, la verdad es que no. Escuche, oficial, me encantaría hablar con usted de esto pero en este precioso momento estoy en terapia con un chico, apreciaría que nos dejaran terminarla -.

En ese momento parece que el oficial cayó en cuenta de que había interrumpido una terapia.

- ¿Le importa si me quedo? -. Preguntó el oficial.

- Eso depende del paciente -. Ambos voltearon a verme. Por dios, Miguel, ¿no podías ponerme en una posición más incómoda?

- P-por mi esta b-bien -. Por dios, Rubén, madura.

- De acuerdo, entonces os agradecería si os pusierais al fondo de la habitación para darle espacio al chaval-. Dijo Miguel, ambos sabemos que soy más que solo un "chaval".

Los oficiales se dirigieron al fondo de la oficina. Podía sentir sus miradas clavadas en mi nuca; poco a poco noté como me ponía más nervioso. Mis manos temblaban y comenzaba a sentir como el sudor caía por mis sienes.

- Rubén, tranquilo, ¿que pasa? -. Pregunta Miguel tras sentarse en su silla.

- Lo siento, señor, los oficiales siempre me han puesto muy nervioso -. Digo sonriendo, puedo notar el ligero asombro e incomodidad de Miguel al escuchar que le he llamado "señor".

- Puedes estar tranquilo, Rubén, no te harán daño -. Dijo sonriendo, como amo su sonrisa, necesito controlarme con todas mis fuerzas para no verlo con esos ojos de amor que me salen cada vez que le veo.

- Bueno, Rubén, me decías de Ust, tengo algunas preguntas, si te sientes cómodo con eso -. Dijo Miguel mientras abría una carpeta, supongo que mi expediente.

- Claro que si -.

- De acuerdo, ¿cuál fue la primera aparición de Ust?-.

- Hace un par de días -.

- ¿Y qué suele decirte? -.

Estaba a punto de contestar pero el oficial me interrumpió.

- Perdona que interrumpa pero necesito saber, ¿qué hace el aquí? -. Preguntó refiriéndose a Luzu.

- Yo soy un enfermero, oficial, uno de los más capacitados, y Miguel me ha pedido que asista a sus terapias con pacientes ya que soy quien más tiene comunicación con ellos -. Dijo Luzu sonriendo, el oficial asintió.

- Gracias, prosigamos, Rubén. -. Miguel me alentó a seguir hablando.

- Suele amenazarme, me habla de mi familia y cuando no le obedezco-

- Una palabra más y estás muerto -.

Joder...

———————————————————————————
Procuraré actualizar más seguido ahora que estamos en cuarentena... c: los amo bye

Rubegetta o rubelangel?

Repara un corazón •RUBELANGEL• Donde viven las historias. Descúbrelo ahora