III

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01 de Noviembre del 2019, Londres, Inglaterra

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01 de Noviembre del 2019, Londres, Inglaterra.

Un peli blanco paseaba nervioso de un lado a otro, llevaba un mes sin obtener noticias de su hermanita y eso lo ponía mal, la policía no tenía pistas de quién podía haber hecho eso, la persona sólo dejaba fotografías de Emma dormida o de cuando la seguía, pero no encontraban algo que pudiera servirles.

–Jack – la voz de su novia hizo que la mirara y dejara de pensar tanto en lo que sucedía – Cariño, sé que estás alterado pero ya hiciste todo lo que pudiste y debes mantener la calma por tu familia – la platinada abrazaba a la señora Frost mientras que en el mueble de enfrente estaba Rapunzel abrazada a su pareja. Jack suspiró, tenía razón, debía mantener la calma por su mamá y su hermana

–Lo siento – dijo apenado y sentándose junto a su novia – ¿No quieres que te lleve a casa, Els? Ya es tarde... –

–Le dije a Anna que me quedaría a apoyar a Punzie y a Jacqueline, no quiero dejarlas solas y tampoco quiero dejarte... –

–Eugene está aquí y también puedo encargarme de ellas... –

–Cariño, ambos sabemos que por más que te hagas el fuerte, te duele mucho – el peli blanco suspiró, no era verdad, cubrió su rostro con sus manos y Elsa dejó de abrazar a su madre para envolver a su novio entre sus brazos

–Y-yo n-no sé qué haré si no la encuentran, éste sujeto parece que tiene todo calculado... y ella es tan sólo una niña... – el chico lloraba en los brazos de su pareja, ella sólo se limitaba a acriciar su cabello, quería a Emma como su hermana y le dolía lo que estaban pasando, pero, no podía decirle a Jack la verdad, no debía saberlo...

–Llevaré a Punzie a su habitación – comentó un castaño llamando la atención de la pareja de albinos, la peli dorada yacía dormida en sus brazos

–Te acompaño – habló la señora Frost y se levantó del sillón – Gracias por todo, Elsa – la chica sólo sonrió, la mujer subió las escaleras de su casa y Eugene la siguió llevando a Rapunzel entre sus brazos

–Cariño... – llamó la platinada al chico, él levantó un poco su cabeza para poder verla – Debes descansar, no has dormido en varios días y estás muy estresado, eso te hará daño... –

–No quiero dormir, quiero a mi hermanita de vuelta – Elsa sentía que se le encogía el corazón verlo de esa forma ¿qué persona sería tan cruel para haberse llevado a una niña de tan solo 11 años?

–Yo te entiendo, pero te hará daño y a Emma no le gustaría que estuvieras así... –

–¿Y si no regresa nunca? ¿Si nunca la encontramos? – Jack la miró a los ojos, Elsa pasó una mano por su mejilla oara tratar de calmarlo – N-no podría vivir si algo le pasara... –

¿Dónde está Elsa? Donde viven las historias. Descúbrelo ahora