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confiaré en ti

-¡solo eres una estúpida que no sirve para nada!-dijo una voz masculina

Hana débilmente y poco a poco se comenzó a levantar, pero una patada en el estómago la volvió a tumbar, ella cayó y comenzó a toser

-Tu y tu madre solo son unos pedazos de carne que sólo sirven para desgraciarme la vida-dijo la voz

-noo...mamá es...-dijo con una voz temblorosa antes de que un golpe en la cara la interrumpiera

-por eso te vendí con ese mercader, porque sólo para eso sirven ustedes, para ser putas-dijo la voz

Hana no paraba de llorar, todo estaba muy oscuro, todo estaba muy tenso, poco a poco comenzó a sentir como su cuerpo se tensaba y como cada parte de ella comenzaba a arder como el fuego, la figura estaba parada frente a Hana, ella logró distinguir que en la mano de la figura había una botella, pero al momento de parpadear, otra figura se formó al lado de la figura

-pero mira que hermosa, te haré sentir bien, no te preocupes-dijo la voz mientras se acercaba

ella cerró los ojo mientras se alejaba de esa figura caminando a espaldas, pero en un momento topó con algo, al sentir que chocó con algo abrió los ojos y volteó, pero al voltear vió otra figura de color oscura, las lágrimas comenzaron a caer con mayor frecuencia, Hana intentó alejarse pero se dió cuenta que muchas figuras de color negro la estaban rodeando formando un círculo, poco a poco las figuras se comenzaron a acercar a Hana, algunas decían

-no debiste hacer eso-

-voy a hacerte pagar-

-el precio no valía la pena-

Y entonces todos comenzaron a hablar, las voces se comenzaron a hacer en sintonía, el cuerpo de Haba ardía, le dolían todas las partes del cuerpo, tambien sentía que su cabeza estaba a punto de explotar provocando que llevará sus manos a agarrarse la cabeza y apretara los ojos, su llanto se comenzó a silenciar, pero una voz se distinguió de todas las demás, una que le dió tranquilidad y paz

-no dejaré que te hagan daño-

Hana abrió los ojos de golpe y al abrirlos vió que Garou estaba frente a ella, el dolor y el ardor se fué, el dolor de cabeza se desvaneció por completo, la preocupación e intriga fueron eliminados por completo, la oscuridad ya no gobernaba el sitio, ahora había mucha luz, un lugar blanco y tranquilo estaba entrando en ecena, Garou pasó su mano por el rostro de Hana, quitándole las lágrimas que brotaban de sus ojos, la mirada de Hana era de alegría, entonces después de limpiar las lágrimas Garou abrió los brazos, dando a entender a Hana que lo abrazara, Hana sin dudarlo ni un segundo, abrazó a Garou mientras lloraba de alegría

-yo siempre cuidaré de ti-dijo Garou

antes de que Hana despertara de golpe, tenía unas cuantas lágrimas en el rostro, estaba acostada en el suelo, no sabía dónde estaba ni que había pasado con sus captores, pero por el color cielo logró distinguir que era de noche, la luna estaba en su punto máximo, Hana no sabía que estaba pasando, hasta que sintió una respiración es su nuca, tranquilamente volteó y vió a Garou abrazandola por la espalda, los brazos de Garou enrrollaban por completo a Hana, al ver los brazos de Garou vió que estaban envueltos en vendas y unas manchas rojas se hacian notar en algunas partes de las vendas, fué entonces cuando Hana se dió cuenta que cuando Garou exalaba salía vapor,(la brisa que sale cuando hace mucho frío) pero Hana no sentía frío, fué cuando comprendió que Garou la estaba abrazando para darle calor, ella sonrió y recostó su cabeza pero al recostarla sintió algo suave, como una almohada, al levantar la cabeza vió que era la camiseta negra de Garou, eso significaba que Garou no tenía camiseta, así que Hana pensó en despertar a Garou para que se pusiera su camiseta preocupándose por su salud, pero su garganta estaba tan seca que pronunciar una palabra le dolía, así que sólo se recostó y durmió, nunca había dormido tan tranquila como esa noche.