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JungKook preparaba el desayuno escuchando a su novio tararear una canción mientras se bañaba, él apenas y se levantaba pero TaeHyung trabajaba estos días, después de las sesiones pasadas, consiguió unas nuevas con un estilo diferente para promocionar el verano.

Sí sabía que era la época favorita del castaño así que posar para cámaras en este tiempo era tener a Tae en su momento de gloria. Además de promocionar marcas importantes con mensajes importantes como lo era la belleza en los Omegas hombres.

Dejó la manzana y las fresas del menor en la mesa, bebiendo su café camino.

Le vio salir secando su cuerpo frente al espejo, muy concentrado en su imagen que lo se dio cuenta de la mirada llena de lujuria que JungKook le dedicaba desde un lado de la habitación.

Y pensar que esa escultura de chico era solo para él.

Su historia de amor fue algo extraña, llevaban dos años viviendo juntos, justo después de terminar la universidad, TaeHyung se mudó con él. Pero antes de eso, eran conocidos, teniendo de amigo en común a JiMin.

Apenas cruzaban palabras y no parecían interesarse por el contrario. Fue un día en el gimnasio, cuando TaeHyung estaba entrando a las duchas para retirar los restos de sudor en su cuerpo. JungKook no tenía intenciones de verle desnudo pero las duchas eran abiertas y digamos que él se metió justo en la de enfrente, al cabo de dos minutos se giró por curiosidad y TaeHyung le veía sonrojado y con cierto problema en su entrepierna.

Sí, tuvieron sexo en las duchas de un gimnasio.

Se puede decir que fue la única vez que no utilizaron ningún tipo de protección.

—Te he dejado tus cosas en la mesa de la cocina -Habló dejando la taza en la mesita de noche y caminando hasta el menor- Uh... te ves muy bonito así...

—No llevo nada -Dijo observándose en el reflejo.

—Exacto -Rodeó la cintura de su novio, pasando sus manos por su plano abdomen- ¿Serán muchas horas? -Su nariz se adentró en sus castaños cabellos, disfrutando de la cercanía con su novio.

—Creo que sí...

Se despidieron con un largo beso, donde no había dobles intenciones, solo era la necesidad que tenían uno por el otro que era difícil pasar tiempo separados.

TaeHyung salió primero, unos minutos después JungKook y el departamento se quedó totalmente vacío.

Unas horas más tarde, Kook fue el primero en regresar, buscando rápidamente algo para cocinar y que su Omega no tuviera que ponerse a ello, sabía que algunas marcas eran jodidamente exigentes y no era de extrañar que le hicieran repetir una foto cuarenta veces hasta que quedara de su gusto.

Algunas veces veía llegar a su Omega con los ojos rojos, algunos moretones en su cuerpo o marcas de ropa remarcadas en su piel morena. Y eran cosas del trabajo, TaeHyung entendía así que casi nunca se quejaba de ello. Pero sí con JungKook, quien sin pararse a pensar hacía en su cuerpo el mapa entero de Rusia.

Después de cocinar y tener todo listo para comer con su pareja, se dio un merecido baño, destensando sus músculos y relajándose. Vaya día de mierda había tenido, pero sabía que con la llegada de su Omega, todos esos nudos en la cabeza se disolverían y dormirían acurrucados en l cama recordándose lo mucho que se aman.

Salió de la ducha con una camiseta ancha y unos pantalones holgados, sin calcetines y con el pelo algo húmedo. Podían ser las diez de la noche pero el calor comenzaba a apretar.

Si Tae le veía así, probablemente le obligaría a calzarse y le secaría él mismo el cabello, luego una larga sesión de besos contra la pared.

Anticonceptivos [𝕴]| kooktae | Omegaverse Where stories live. Discover now