serendipia- Gonzalo Montiel

ocho

Lía

El cielo naranja se asoma en el monumental mientras que los jugadores salen del tunel siguiendo el ritmo de las canciones de los hinchas, la verdad es que yo no soy una gran fan del futbol, es más solo vine para ver si me cruzo a Gonzalo y puedo tirarle algunos chamuyos, pero estas cosas te hacen querer venir mas seguido.

Cuando todos jugadores estan en cancha el árbitro le da el comienzo al segundo tiempo del partido, mi mirada se centra en Gonzalo, sin importar que tenga la pelota o no. Estoy concentrada viendolo desplazarse a lo largo de la cancha cuando un los gritos de entusiasmo me sacan de mi trance, el gol de Matías no tarda en aparecer en la gran pantalla del estadio. Quince minutos abran pasado cuando Gonzalo ingresa al area grande, filtrandose entre los defensores del equipo contrario, y patea la pelota de tal manera que entra al arco, lo veo correr un poco y luego aterrizar con las rodillas, y su cabeza mirando al cielo.

Este si lo grite, y con una sonrisa en la cara.

(...)

—felicitaciones por el gol— me acerque a abrazarlo cuando vi salir de vestuario

—gracias— sonrio— hace rato no hacia uno y por suerte se me dio

—sos crack eh

—emm— se rasca la nuca nervioso— ¿queres venir a comer a mi departamento?

—bueno dale— me encogí de hombros

—igual si no podes no te procu...

—hola Li— lo interrumpió mi papá—no sabia que se conocían— nos miro confundido

—si, nos conocimos el dia que te acompañé al river camp— largué un risita nerviosa mientras que Gonzalo asentia repetidamente

—ahh, bueno. Vamos a ir a comer con tus hermanos y tu mamá, ¿venis con nosotros?

—no puedo pa, ya habia arreglado para hacer otra cosa

—bueno, no vuelvas tarde y abrigate que hace frio— nos saludo a ambos y se fue

(...)

Rei entrando al departamento de Gonzalo y viendo como primera plana el sillon, a lo que el me miro confundido, pero despues de unos segundos sus cachetes tomaron un poco de color.

—¿repetimos?— lo mire subiendo y bajando las cejas

—hay que cocinar Lía- camino rapido perdiendose en la entrada a la cocina

—¡Osea que eso es un si, más tarde!— grite al mismo tiempo que me sentaba en el sillón y prendía la tele

A veces solia ser un poco, bastante, confianzuda.

—Gon

—aja— contesto desde la cocina

—¡quisiera que fueras paleta, para chuparte hasta el palo!— volví gritar riendo mientras que leia un hilo de piropos

Al no oír respuestas camine a la cocina donde lo encontré cortando verduras, obviamente ya con ese color rojizo en las mejillas

—me haces poner nervioso— dijo en un susurro

—bueno perdon, es que mira que hermoso sos con los cachetitos asi— tome su cara entre mis manos y le di un beso— ¿qué vamos a comer?

—tacos veganos ¿te gustan?— me miro dudoso, a lo que yo asenti

—tu pito también me gusta, ¿puede ser el postre?

🐔🐔🐔

Bastante Pete, pero hace rato no subía