Raro

Capitulo Uno

Otra semana empezaba, un cálido lunes le saludaba por la mañana, los pájaros le cantaban y la ventana abierta hacia que la pequeña brisa jugará con sus cabellos, haciéndole cosquillas en su rostro.
Obvio que se despertó de mala gana, quería seguir durmiendo pero aún así hizo el esfuerzo para levantarse y vestirse para ir a clases, todo iba correcto a partir de allí, sin embargo, a penas salió de su habitación, lo sintió.

Una sensación un poco rara invadió su ser, queriendo mirar a todos lados para ver qué era eso que lo observaba. Que suerte o no, ver al de pelos raros ir con el, en este caso: Kirishima.

— ¡Hey Bakubro! ¿Preparado para hoy? — dijo mostrando aquellos dientes de tiburón que lo caracterizaba.

— Cállate, recién me levanto y no tengo ganas de escuchar tu chillona voz. — hablo de mala gana el ojos carmín mientras colocaba sus manos en los bolsillos de su pantalón.

— ¿Eh? ¿Te quedaste dormido? Seguro que entrenaste hasta tarde y no escuchaste las alarmas. — pensó en voz alta Eijirou mientras sus dedos índice y pulgar se posaban en su barbilla.

— Tsk ¿Y que si me quedé hasta tarde? No es tu puto problema.— gruñón como siempre, entro al salón y se sentó en su pupitre, acomodando sus útiles para la clase.

— Jaja, no hay nada malo en eso pero solo me preocupo por ti bakugou.— de forma típica, fue siguiendo al rubio y al escucharlo decir eso, paso un brazo por el cuello de su contrario.

Era sabido por ambos que al hacer ese contacto, solo recibiría un golpe, ya que Katsuki le gustaba su espacio personal y por más que Kirishima lo abrazaba por cariño, a el no le gustaba. Era bueno que el pelirrojo tenía aquel quirk, sino siempre tendría algún moretón de parte del rubio, aunque a veces no alcanzaba a usarlo.

(...)

Ya había pasado dos horas y esa sensación extraña había desaparecido pero.. Cuando tocó la campana para el almuerzo y se encamino a la puerta, había vuelto.
Cómo si alguien siempre veía lo que hacía o estuviera allí sin importar que hiciera u con quién estuviera, ese sentimiento penetrante que le subía los nervios estaba haciendo que comenzará a dudar ¿Debía mirar atrás? ¿Quien lo miraba? ¿Y si le partía la cara? Era bueno ocultando sus emociones pero no significaba que no tuviera, después de todo, el también sentía.

Cuando llego al comedor, busco su desayuno y fue hacia una mesa, fue poco el tiempo para que sus "amigos" fueran con el, haciendo que la tranquilidad y ansiedad desaparezca pero manteniendo esa faceta de Edge Boy. Sin embargo, por instinto fijo su mirada adelante y lo encontró, aquel que lo hacía sentir incómodo u como si estuviera inseguro a dónde vaya, lo tenía en frente. Y no, no era el estúpido Pikachu que se había sentando al otro lado de la mesa y quedando en frente, sino..

Shoto Todoroki.

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Si, lo sé, seguramente esperaban algo más emocionante de leer y no esté sorete xd
Pero como todos saben, cada historia tiene un comienzo y esta caGAda es uno.

¡En fin!
Poco a poco iré subiendo más, solo se necesita de paciencia, ya que por la cuarentena, tengo más tiempo pero no por eso me dejas andar sin hacer nada, por lo que los deberes como limpiar, cuidar de la bendición, darle de comer día/noche a mis bestias (tengo dos perros bellos como el sol y el nene de la casa, mí gatito 💕), hacer de niñera y completar los 12 u más trabajos de escuela que me mandan es algo complicado, más encima que todos los viernes dan nuevos Trabajos Prácticos :')

A pesar de eso, voy a hacer la historia, aunque me tarde semanas o meses ¡Está historia tendrá un final! Pero por el momento, les doy este comienzo B)

♥Gracias por leer♥