Heejin no podía distinguir ningún color más que los grises en todas su tonalidades, hasta que la conoció a ella.
-Siento que tengas que ver esto, ahora me cubro.
-Hey! Detente, me gusta(s) así.
¿Qué estaba tratando de decirme ahora? Kin Hyunjin por la chucha.
Lo único que sé, es que debo irme ahora a donde está. El mirador.
Dudé un poco en hacerlo pero hay veces en las que debo ser mi prioridad. Le llamé la atención a Jiwoo.
HE: ¿Puedo irme? JW: ¿Tenías algo que hacer?
Agaché mi cabeza, ya no quiero mentirle de nuevo. Pero es muy complicado decirle lo que iré a hacer.
JW: Heejin está bien que tengas que irte, ¿ya? No te sientas culpable, es totalmente normal que debas salir o algo por el estilo. HE: Es que quedé de hacer cosas con Hyunjin y le cancelé para acompañarte, pero ahora me siento mal y quiero verla... JW: Ve entonces, ¿qué estás esperando? HE: Gracias por entenderme
Me levanté muy rápido mientras agarraba las cosas que tenía esparcidas.
JW: Cariño, siempre te voy a entender, lo único que debes hacer es decirme las cosas no ocultarlas, ¿sí?
Beso mi frente dulcemente, como siempre lo hace.
HE: Te amo. JW: Yo igual.
Empecé a caminar hacia la salida con mis cosas en una mano un café en la otra y un grito me detiene.
JW: ¿Piensas ir volando o algo por el estilo?
Mierda, olvidé completamente que no tengo como cresta llegar a donde quiero ir.
JW: ¿Necesitas que te lleve?
No debería pero es mi única opción. ¿Por qué me ponen en esta situación?
JW: Andando.
Ya está, arruiné todo.
JW: No me es problema Heekki. Así el olor a cloro sale de mi nariz.
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Estábamos en el auto, encima llevábamos bastante tiempo recorriendo la carretera pero aún no lograba reconocer exactamente dónde paramos esa tarde.
JW: ¿Dónde se supone que está? HE: En un mirador... JW: ¿Sabes cómo llegar?
Yo sólo miraba por la ventana esperando encontrar una señal, hasta que de un grito salté. Allí estaba su moto. Jiwoo alcanzó a detenerse y aparcar fuera de la acera, sin chocar.
