Nuestro Amor

Todo está perfecto tal cual.

Jaime: Comamos poh... -Dijo mientras hacía una señal a Nicolás para que se sentara, e imitándolo se sentó frente a él. Comenzaron a comer de manera tranquila hablando de una que otro tema cualquiera, todo era tan perfecto para los dos. Terminaron de comer y reposaron un rato, Nicolás se levantó y fue al sillón, mientras Jaime buscaba quien sabe que. Jaime llego junto a Nicolás con una caja de chocolates. Jaime se sentó junto al moreno, mientras habría los chocolates, los dejo a un lado y miro a Nicolás, estaba claro lo que quería.

Jaime: Te falto el postre –Dijo mientras palpaba un poco sus piernas, Nicolás de inmediato se levantó para sentarse sobre Jaime.
Nicolás: Dame poh...-Nicolás paso sus brazos por el cuello de Jaime, mientras este ponía uno de los chocolates en su boca, dejando la mitad a la vista, Nicolás sonrío, mientras de manera lenta se le acercaba a la boca y mordía sacando un poco del chocolate, luego lamio despacio, volvió a sonreír y comenzó a besar a Jaime, era tan dulce, tan suave, igual que la primera vez... Nicolás sintió la lengua de Jaime acecharlo, y sin miedo le dio el paso libre, se estremeció al sentir tan sutil contacto, Jaime trato de tomar otro chocolate, pero Nicolás le tomo la mano- ¿Crees que son necesarios?... Tú eres mi postre. –Lo último lo dijo con una voz cargada de sensualidad y lujuria. Jaime sonrío y puso sus manos en las caderas de Nicolás, mientras se acercaba a lamerle el cuello despacio, sintió cuando Nicolás se estremeció al sentir su húmeda lengua rozarle la piel, Jaime mordía despacio dejando una que otra marca.

Nicolás: No poh... me van a ver –Dijo a penas mientras seguía suspirando-
Jaime: Esa es la idea... para que sepan que tienes dueño, para que sepan que eres completamente mío. –Aquel tono del barbón lo hizo sentirse importante y hasta orgulloso, comenzó a mover sus caderas despacio, quería más contacto... lo necesitaba.

Jaime sonrío al sentir como Nicolás se movía despacio, se estaba excitando y su amigo estaba despertando. El moreno rio algo burlesco a sentir el bulto que estaba debajo de él, y sin ningún temor, bajo una de sus manos y la introdujo con agilidad en el pantalón de Jaime, tomando de manera torpe el miembro de este y apretándolo un poco, elmo al sentir aquel contacto soltó un pequeño gemido, saco de manera lenta la mano de Nicolás, mientras este sonreía triunfante, se desnudaron de manera lenta y volvieron a su posición inicial. Jaime sonrío y miro el miembro erecto de su amigo, sin pensarlo dos veces bajo una de sus manos y comenzó a masturbarlo, Nicolás se aferraba al cuello de Jaime gimiendo suavemente sobre el oído del comunista, esto le excitaba aún más al barbón.

Nicolás: Ja-Jaime... n-no puedo más –menciono despacio, enterrando sus uñas en la espalda de Jaime- ¡Ja-Jaime~! –Soltó un gemido algo fuerte mientras el líquido los manchaba a ambos. Jaime sonrió de manera dulce y volvió a besarlo, bajo despacio lamiendo su cuello, luego el pecho e incluso los pezones, hasta que sintió una mano de Nicolás en su pene- ¿Puedo? –Preguntó algo tímido, Jaime asintió de manera pausada, sintiendo como la mano de Nicolás bajaba y subía sobre su miembro, se sentía realmente bien, y no era tanto la acción sino más bien quien la estaba cumpliendo. Comenzó a sentir como un calor se hacía presente en su parte baja, se estaba por venir.

Jaime: Nico...me voy -murmuro despacio notando como Nicolás sonreía y movía su mano con más rapidez, no aguanto mucho de esa forma. –Pe-perdón...-Nicolás sonrió mientras lo volvía a besar.

Nicolás: Te quiero dentro de mí –Dijo sin miedo, mientras el barbón bajaba una de sus manos a la entrada de Nicolás, comenzó metiendo un dedo con lentitud sintiendo como Nicolás se estremecía, no había sido necesario lubricar por el simple hecho de que al correrse Nicolás y él, le había manchado la mano.
Jaime: ¿Te duele? Si quieres puedo parar... -Dijo al sentir un gemido-
Nicolás: N-no... mete o-otro –Dijo algo nervioso, mientras Jaime metía otro dedo, los movía despacio, al sentir que Nicolás ya no estaba tan tenso metió un tercero, después de un rato sentía que el moreno ya se había acostumbrado y gemía de manera tímida en su oído. Saco sus dedos mientras Nicolás cerraba sus ojos, sabía lo que se vendría ahora. Jaime levanto un poco a Nicolás y masajeó un poco su pene para lubricarlo un poco más, cuando sintió que fue suficiente lo acomodó en la entrada de Nicolás, viendo como este se sonrojaba y apretaba sus labios, lo bajo de manera lenta mientras besaba al moreno, Jaime se levantó recostando a Nicolás boca arriba.
Jaime: Quiero verte –Dijo con voz ronca, Nicolás abrió los ojos de manera lenta, Jaime comenzó a moverse muy lentamente hasta que noto como Nicolás también se movía.- ¿Quieres que vaya más rápido?-Dijo algo burlesco, se le acercó al oído- Pídemelo –Pronunció, mientras Nicolás trataba de mirar a otro lado.
Nicolás: Más r-rápido...-Mencionó apenas, sintió como Jaime le daba una fuerte estocada – ¡Ah~!- Gimió de manera sonora, mientras Jaime iba aumentando cada vez más la velocidad, Nicolás gemía una y otra vez el nombre de Jaime, mientras este sonreía de manera triunfante, al cabo de un rato ambos sintieron que el orgasmo se aproximaba – Ja-Jaime...no puedo más... ah~.
Jaime: U-un poco más...-Comenzó a aumentar la velocidad, no paso mucho para que los dos se corrieran al mismo tiempo, Nicolás enterró sus uñas en la espalda del barbón mientras sentía como el semen de Jaime se esparcía dentro suyo.
Nicolás: Mm...-Soltó despacio, Jaime lo volvió a levantar sin sacar su pene del moreno, se sentó con el moreno encima mientras sonreía y le besaba el cuello con un gran sentimiento de satisfacción.
Jaime: Nico... -Llamo despacio, notando como este pasaba sus brazos por su cuello y se dedicaba a mirarlo.
Nicolás: ¿Qué pasa? –Preguntó de manera curiosa.
Jaime: ¿Queri' pololear conmigo? –Dijo algo nervioso.
Nicolás: Obvio que si poh –Se besaron de manera lenta, separando de igual forma- Oye... ¿podí salir? –Preguntó algo tímido.
Jaime: No quiero –Dijo Jaime algo infantil, para luego reír, tomo la cintura de Nicolás y lo levanto despacio, vio como Nicolás cerraba los ojos y volvía a soltar un gemido. Luego lo bajo y lo volvió a sentar sobre él, aunque claro, esta vez sin su pene dentro.
Nicolás: Te Amo...-Dijo sobre el hombro del barbón.
Jaime: Yo también Te Amo –Respondió este- Nicagando podi caminar –Se burló fuertemente mientras reía y veía a Nicolás sonrojarse y fruncir el ceño.

Pasaron toda la tarde juntos regaloneando, y claro Jaime cuidando al pobre Nicolás de sus dolores físicos en la parte baja de su cuerpo. Ese día Jaime se quedó a dormir junto a su pololo. Estaban realmente felices juntos, aunque claro, a pesar de estar juntos seguían peleando de manera estúpida, aunque los dos sabían que no era enserio porque luego se echaban a reír. Seguían teniendo la misma confianza de siempre, podían agarrarse a chuchas sin enojarse, después de todo, también eran mejores amigos.

Llevaban cerca de 1 año de su relación, pasaban por altos y bajos como toda relación, pero siempre lograban solucionarlo por el gran cariño y amor que se tenían, sus vidas no habían cambiado tanto, pero si lo comparáramos con sus vidas hace un año atrás, se vería la gran diferencia. Hace unos meses se habían ido a vivir juntos en un departamento en el centro de Santiago, junto con su amigo Edgar habían decidido cerrar el canal por cuestión de tiempo, tenían un trabajo estable y una vida bien ordenada por así decirlo.

Jaime: Nico...-movía despacio a su pareja quien dormía relajado a su lado- Amor poh... -seguía moviéndolo despacio, aunque claro... con la poca paciencia que tenía- Despierta poh Ahueonao! –lo movió bruscamente mientras el otro reaccionaba asustado, se volteó para ver a Jaime, este simplemente le sonreía ladino-