Parte 1

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10 días antes del debut.

Era un frío martes, las gotas de lluvia caían suavemente sobre el lugar. Eran casi imperceptible, ya que sólo avisaban que la lluvia caería en cualquier momento. El pequeño Jungkook sostenía la mano de la chica frente a él, la acariciaba con su pulgar y la miraba con tristeza. Algo tenía para decirle, algo que lo estaba matando por dentro, pero debía hacerlo porque se lo había prometido a su CEO. Así que, tomó valor, infló el pecho y luego soltó las palabras que rondaban en su cabeza.

–[T/n], te amo– ella sonrió mirándolo enamorada –pero debemos dejar de vernos y fingir que no nos conocemos.
Los ojos de la chica se abrieron en asombro, no quería creer lo que Jungkook estaba diciéndole. Le estaba confesando su amor por primera vez, pero al mismo tiempo la estaba alejando de él.
–¿Por qué?, ¿Te avergüenzo?– su voz comenzaba a temblar a medida que ella aguantaba las ganas de llorar.
–El amor que siento por ti se está interponiendo en mis sueños– confesó y corrió la vista para poder evitar que la chica lo viera llorar.

Jungkook sufría de ardor en la garganta por aquellas palabras que quería decir y no podía, además se mezclaban con las ganas de llorar y gritar. Es ese sentimiento tan doloroso que te hace sentir impotente. El chico agradecía que en ese momento las gotas de lluvia fuesen más fuerte y así pudiesen mezclarse con sus lágrimas para que no lo viera llorar porque él debía ser un chico rudo, aunque él ni siquiera sabía que significacaba ser así, pero eran ordenes de la empresa.

La chica soltó su mano al escuchar las duras palabras del castaño, por supuesto que ella no quería interponerse en eso porque ella lo amaba tan intenso como el primer amor. Ese tipo de amor que te lanzas con todo, donde sientes que será eterno y que no hay nadie más para ti en el mundo. Así se sentía con Jungkook cada vez que estaban juntos, pero lastimosamente todo terminó de la peor forma posible, exactamente igual que todos los primeros amores. Lo que le hizo pensar que ella y él no eran especiales y estaban destinados a separarse.

–Prométeme que no me buscarás y que no hablarás de mi en Internet– él miraba el suelo.
–Lo prometo. Ahora déjame sola.

Jungkook asintió triste, se sacó su abrigo para ponerlo sobre los hombros de ella, dio media vuelta sin mirarla y se alejó dejándola sola en el puente panorámico más atractivo de la ciudad a pesar de estar muy mal cuidado. Este sería el lugar donde jamás jamás ella podría volver a pisar de nuevo.
Antes de subirse al auto, el chico la miró por última vez y sonrió con dolor dejándola completamente sola.

[T/n] comenzó a llorar casi sin poder detenerse, sus rodillas temblorosas hicieron que ella tuviese que afirmarse de la barandilla, lloró y lloró en aquel lugar sin importar que alguien estuviese mirando. Cuando estuvo lista para irse de allí tiró la chaqueta del chico al suelo con rabia para marcharse, pero de un bolsillo salió un papel doblado que comenzaba a mojarse. La chica lo tomó rápido y lo leyó.

«Espero que tú y yo podamos coincidir en otro momento, JJK.»

Prohibido - JK [TERMINADA] Where stories live. Discover now