#4 Muy Diferente

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No sabía que decirle a Mía. Solo me dedique a mirarla ella no dejaba de llorar por su cabello.

«¿Por qué las mujeres se preocupan tanto por él? » pensé, negué con la cabeza mientras volteaba a Mía.

— ¿Qué haces? — pregunto algo asustada. — Espera un segundo — Mire una bola de cabello en el centro de su cabeza con pasadores, enredos y muchas cosas que las chicas usaban ;  parecía un festival de cabello en su cabeza. suspire un poco aliviado.

— No te lo corto — Mía se volteo para verme a los ojos tan abierto que parecía que se saldrían de sus órbitas.

— ¿Pero qué dices Malik no vez lo corto que esta? — dijo agarrando un mechón el cual parecía muy corto. Mía definitivamente tenía muy mal carácter.

— Si lo veo pero tienes un festival de cosas para la cabeza que ustedes las mujeres usan en la parte de atrás de la cabeza — Mía llevo sus manos hacia donde le había indicado.

— Pero estoy segura que Amanda lo cortó tenía unas tijeras en sus manos —No sabía qué hacer acaso yo era peluquero, estilista ¿o algo similar?

— ¿Quieres que te ayude? — Mía me miro estaba vez muy furiosa. — ¡No necesito tu ayuda! — chillo enojada. Agarro su maleta y se estaba por marchar en dirección opuesta a la mía.

— Por cierto ¿Por qué Amanda dijo que estaba saliendo contigo? — Su ceño estaba fruncido, si las miradas mataran estaba más que seguro que Mía ya lo hubiera hecho conmigo y me encontraría quien sabe a cuantos metros bajo tierra.

— Esta mañana me estaba molestando y a Harry se le ocurrió decir que estaba saliendo con alguien — Mía arqueo una ceja. — ¿Y yo porque? — No sabía que decirle 

«¿Es que eres más o menos un juego que tengo con mis amigos?» pensé si le decía eso quería seguro  me pateara la entrepierna. — Pasaste por nuestra mesa — Ella pareció relajarse un poco.

— Te pido que no te vuelvas a meter conmigo no quiero tener nada que ver contigo tus amigos o similares — Mía se volteo y se macho rápidamente de la escuela me quede mirando el camino que recorría hasta que se hizo chiquita y desapareció de mi vista.

Pase mi dedos por mi cabello, ¿en qué me estaba metiendo? La verdad dudaba que ella y yo pudiéramos tener una conversación amena, por lo que acaba de notar Mía no me toleraba ni a mí ni a mis amigos aunque no entendía la razón.

Me fui caminado como de costumbre hasta mi casa, aunque la verdad no sabía qué hacer con los chicos y el tema de Mía, aunque había sido el día que mas me la había encontrado y lo que realmente quería hacer era evitarla a toda costa, no podía negar que tenía un carácter muy duro.

Unos minutos caminando llegue a casa, si me hubiera quedado más tiempo afuera estaría mojado de pies a cabeza solo pasaron unos segundos antes de que la lluvia comenzara a retumbar contra las ventanas.

— ¿Hola? — pregunte mirando a todas partes el segundo piso estaba apagado al igual que todo el primer piso.

— ¿Zayn? — una vocecita me hizo mirar para la entrada del comedor. — ¿Safaa que haces ahí solita? — camine hasta donde estaba mi pequeña hermana.

— Todos te estábamos esperando para  cenar — Odiaba que mi mamá hiciera que mi hermanita me buscara, sabia el poder que ella y Waliyha tenían sobre mí.

— Pequeña pero estoy cansado quiero ir a dormir — me agache hasta su altura y sobe su mejilla, ella agarro mi mano. — ¡vamos no seas malo! — Hizo un puchero  muy tierno en su rostro.

Ella solo es mi juegoWhere stories live. Discover now