Declaración.

5K 556 308
                                    

Un azabache y un castaño perruno se guiaban a la casa de un albino, en el carro del azabache, el más bajo que iba en el copiloto tenía un sobre grande.

Al llegar, el castaño salió del coche, y llevo el sobre por debajo de la puerta y la tocó, luego se devolvió al coche y se fueron.

El albino se acerco a la puerta, pero piso un bulto. Lo miro y era nada más y nada menos que un sobre, lo tomo y abrió la puerta; al ver que no había nadie se devolvió.

Abrió el sobre y se encontró con exactamente 14 cartas.

Y las empezó a leer.

Mientras tanto había un peli azul en la mansión buscando unas cosas, exactamente las cartas, no las encontraba.

Ellos, tenían un día a la semana para dejar sola la mansión, los que se querían quedar se quedaban pero casi nadie lo hacía. Hoy, era ese día.

Mientras el peli azul buscaba, el azabache y el castaño perruno llegaron a la mansión, ambos fueron hacia el cuarto del peli azul y el más bajo grababa.

Grabó como Trollino y el iban hacia el peli azul, este al verlos arqueo una ceja.

—¿Ustedes que hacen aquí?—;

—¿Buscas las cartas?—;

—¿Y tú cómo...?—; Entendió.;—Trollino, Mike, ¿Que chuchas hicieron con ellas?—;

—Una palabra, Rius.—;

El peli azul se alteró.

—¿¡Que!? ¿¡Trollino, estás idioten!?—;

—¡Oye no me lo trates así!—; Dijo Mike, quien grababa.;—

—Timba, ya es tiempo de que le digas lo que sientes. Creeme, lo conozco y el es capaz de perdonar a cualquier persona incondicionalmente.—;

—Pe–pero y si me_—;

—¿Te rechaza? Por favor Timba el te ama. No pierdas la oportunidad. Si demoras más el podría conocer a alguien más, podría enamorarse de ese alguien, y tú ni le dirías lo que sientes. ¿Lo vas a dejar ir?—;

—Yo...—; Balbuceo algo.;—

—¿Lo vas a dejar ir?—;

—No...—; Dijo aún algo cabizbajo.;—

—¿Lo vas a dejar ir?—;

—No.—; Dijo algo más animado.;—

—¿Que dijiste?—;

—¡NO LO DEJARE IR!—;

Y salió corriendo. Trollino se acerco al celular con el que grababa el castaño.

—Rius, si ves esto recién te llegue, lo más probable es que... Timba ahora toque la puerta.—;

Dejo de grabar. Y un peli azul se devolvió.

—Chicos, yo no tengo carro. ¿Me llevan?—;

Ambos accedieron.

El albino vio el vídeo, aún sin salir de su sorpresa con las cartas. ¡No podía creer que Timba escribiera algo como eso!

"—Rius, si ves esto recién te llegue, lo más probable es que... Timba ahora toque la puerta.—;"

En eso tocaron la puerta.

El albino se paro de golpe, Trollino era bueno en calculo así que lo más probable era que fuera él.

Se medio organizo la ropa y puso un mechón rojo detrás de su oreja. Siempre que al albino le da pena cubre lo más que puede su ojo rojizo.

Abrió la puerta, era el peli azul.

Nunca lo había visto tan nervioso en toda su vida.

—Eh–ah Rius, te–tengo algo que decirte...—;

—¿Si?—;

—Yo–yo que–que–quería decirte que... Tú–tú eres muy especial pa–para mi y yo que–quería decirte que tú me–me...—; El albino soltó una ligera risa, llamando la atención del más alto.;—

—Tu... ¿En serio escribiste eso?—;

—Si... No sabía cómo más expresarme.—;

—¿En serio... En serio sientes eso?—;

El más alto pudo notar como cubrió su ojo rojizo aún más, sentía algo de pena, lo cual le dió ternura; con un brazo le quitó los mechones del ojo y se acercó a su cara.

—Claro que si, y con esa carita ¿Cómo no lo iba a hacer?—;

El albino soltó una risa tierna y quitó la mano de su contrario de su cara, enlasandola a la de él.

Se fueron acercando a la cara del otro, el albino se enpino y el peli azul se medio agachó.

Finalmente se unieron en un dulce beso.

¿Quien lo diría? Riumba Is Real finalmente, gracias a las cartas de Timba y el plan de Mikellino.

Fin de la historia.

Gracias por leer.

Gracias por su apoyo.

Gracias por darme la oportunidad de mostrarles está idea que tenía en mi cabeza.

Y sin más...

Chau!

Razones Para Odiar A RiusPlay By: TimbaVKWhere stories live. Discover now