𝐀𝐒 𝐈𝐅 𝐈 𝐇𝐀𝐃 𝐍𝐄𝐕𝐄𝐑 𝐌𝐄𝐓 𝐘𝐎𝐔 || JJ Maybank [𝘖𝘉𝘟]

Capítulo 2

Narrador Omniscente

— Quiero saberlo todo. — John B.

— Sí. Todos queremos saber. – JJ.

— Uff... no. Dejemos toda la historia para otro momento.— May ya estaba cansada.

— Bueno, pero... ¿Qué pasó ahí en la playa? ¿Por qué estabas así? — Pope preguntó preocupado. May frotó su frente.

— Creo que fue por todas las emociones que me causaron al volver. — Dijo resumidamente. —Eso y otras millones de cosas que pasaron por mi cabeza.

— Uh... claro. Debe ser difícil volver a dejar amigos atrás – Dijo John B. Kiara le da un codazo y con una mirada le dijo todo. A May le resultó graciosa la situación.

—  Sí, pero me voy a ir acostumbrando... los extraño, pero también estoy feliz de verlos a ustedes. — May veía la despedida de sus amigos de otra manera. Si ella no volvía a Outer Banks, no se hubiera reencontrado con los pogues... No todo era tan gris.

— Claro, te entiendo.  Todavía no puedo creer que hayas vuelto y que estés tan cambiada, tan linda. — Kiara siempre fue muy buena y decía lo que realmente pensaba. May es una chica muy bonita y Kiara no era la única consciente de ello, los tres varones también la veían así. 

— Oh gracias... —  May se sintió muy agradecida por el comentario y fue notable por el tono de su voz.  — Bueno, creo que debería irme ya.

—  Dónde vives ahora? — JJ.

— Buena pregunta...emm— May gira los ojos hacia arriba intentando recordar pero no hubo caso. — Sinceramente ni siquiera recuerdo la calle. Pero es cerca de un campo de golf.

— Ah si claro, como si ninguna casa de kook fuera cerca de un campo de golf. - Ríe JJ.

— Es cierto — May también ríe. — pero no hace falta. Ya hicieron mucho, gracias igualmente. — May estaba agradecida por todo lo que hicieron y por el gesto que tuvieron los chicos de acompañar a Kie y a ella a casa.

— Hace falta May. No te olvides que eres una linda kook bien vestida, en un lugar lleno de pogues. — JJ insiste. — Sabes bien que no todos son buenos aquí.

— No te preocupes que kooks buenos hay muy pocos. — Kiara responde. Todos asienten con la cabeza, levantado las cejas, afirmando lo que acababa de decir.

— Como sea — JJ peina algunos mechones rubios y se coloca su gorra — Vamos.

— Voy con ustedes — John B.
Pope le prometió a su papá que volvería a tiempo para ayudarlo, por lo que no pudo acompañarlos.

En el camino, Kie le contó a May sobre algunas cosas que se había perdido todo este tiempo. JJ y John B, hablaron sobre cómo suelen escapar de los polícias, entre otras anécdotas que se les iban ocurriendo mientras caminaban.
Todo mediante risas.

Cuando llegaron a la casa de Kiara, May la envolvió en un abrazo y luego siguieron camino hasta llegar a la última parada de la caminata. 

— Bueno chicos. — May sonríe y se abalanza para abrazarlos a ambos.  — Estoy contenta de volver a verlos. —  Se aleja y cuando está por cerrar la puerta, los saluda con la mano a lo que ellos responden de la misma manera sonriendo.

MAY

Cerré la puerta y me dirigí hacia la cocina para ver qué íbamos a cocinar el día de hoy pero mi papá ya se había adelantado y estaba concentrado con la salsa de tomate.

— Serán pastas hoy! No hubo mucho tiempo. — Se limpia las manos con un trapo. — Qué tal todo?

— Me reencontré con los chicos. — Dejé dos platos en la mesa — No sabes todo lo que me contaron. — nos sentamos a comer.

— Hubo un problema. — Dije sabiendo todo lo que se venía de parte de mi papá.

— ¿Cómo un problema? ¿Qué pasó? 

— Creo que, entre tantas cosas, tuve una especie de ataque de pánico.

— ¡¿QUÉ?! ¿Cómo un ataque de pánico? Mañana vas al médico. — Siempre exagerando. Ya entiendo a quién salí.

— Papá no hace falta un médico para que me diga algo que ya sé. 

— ¿Qué vas a saber? No sos médica, no sabes nada.

— Sé lo sufuciente como para no tener que ir al médico. Tuve muchas emociones en dos días, si?

— Sí, entiendo pero no es algo normal. Si te vuelve a suceder, me harás caso y consultás con un doctor.

— Está bien. — Luego de eso, seguimos hablando y le conté resumidamente lo que pasó hoy. 

Terminamos de comer y me encargué de juntar los platos para situarlos en el lavavajillas. Ordené un poco la cocina y mi padre me saludó para irse a dormir. Posteriormente hago lo mismo. Dejo la luz encendida de uno de los pasillos y me voy a mi habitación, que todavía le faltaba decoración. 

Busqué mi pijama de verano en una de las valijas y sin más vueltas, cepillé mis dientes, me coloqué una crema en el rostro para la piel y me fui a dormir. Costó bastante  porque no paraba de pensar en cómo iba a ser este verano con los chicos. Ya quería salir de fiesta con ellos, pasar tardes en el bote riéndonos.

 Demasiada emoción en un día y mucha imaginación para una noche.

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Estoy muy emocionada por esta historia, ojalá les guste 💛💛

Trataré de ser lo más rápida posible para subir los siguientes capítulos... Aunque no se note, lleva tiempo y ganas tener que redactar 💛