La Hija De Hades

~37~

Narra Melanie

Después de que cada quien hiciera sus peticiones, las cuales fueron algo normal en mis amigos y hermano, Leo y Hannah pidieron herramientas, Annabeth y Alice le pidieron a su madre libros antiguos, Will pidió equipo médico, Dany pidió una guitarra nueva, Lyla pidió un día con su madre para aprender a controlar el poder del arcoiris junto a sus hermanos, Jason una espada, Percy pasar un día con Tyson, su hermano, aunque lo que más quisiera es que le dejarán en paz, y Nico pidió una cajita feliz, al principio me pareció extraño pero luego recordé lo mucho que le gustan esas cosas a mi hermano, Cole y yo ya habíamos pedido nuestro deseo, así que después de cumplir el de Nico, los dioses decidieron organizar un banquete como muestra de agradecimiento, se llevó a cabo en la sala de tronos, los dioses tomaron una altura normal y nos acompañaron, y ahí pude conocer a más dioses aparte de mi padre e Iris.

-Hola Mel-gire mi cabeza y me topé con una mujer muy hermosa, con un maquillaje perfecto, y en ese momento me di cuenta de que tenía a Afrodita delante de mi

-Señora Afrodita-hice una pequeña reverencia y la diosa soltó una pequeña risa

-Porfavor, solo dime Afrodita-levante mi vista y Afrodita me dedico una sonrisa-me di cuenta del aura que irradian tu y Percy

-¿Disculpe?

-Ustedes dos tienen algo, estoy segura, lo más seguro es que te haya contado lo que había dicho sobre el y la hija de Atenea, es muy raro que me equivoque, pero ahora estoy muy segura de que ustedes dos terminarán juntos

-Pero no...-antes de que pudiera responderle, Afrodita desapareció dejando un olor a perfume de rosas en su lugar-¿Ahora qué haré?

-¿Que harás de que Mel?-la voz de Nico me asustó ocasionando que diera un pequeño brinco

-Maldicion Nico, no me asustes así-dije soltandole un pequeño golpe en el brazo

-Tranquila, no es mi culpa que te asustaras tan facil-dijo tomando de su copa-¿De que hablaban tu y Afrodita?

-Dijo que está segura de que Percy y yo terminaremos juntos-dije sin apartar mi vista de Percy, el cual estaba platicando con su padre-¿Y si se vuelve a equivocar como con el y Annabeth?

-Afrodita no se equivoca dos veces querida-dirigi mi vista hacia la persona que me estaba hablando y vi que era una mujer que portaba un vestido primaveral y su tenía su cabello suelto-esta vez está en lo cierto

-¿Per...Perséfone?-pregunté al darme cuenta de quién era

-Asi es, hola Mel-Perséfone me extendió la mano, la cual tome de inmediato aceptando su saludo-admito que no estoy contenta con las infidelidades de Hades, pero no ignorare lo que les ha sucedido, los tres perdieron a sus madres, y aunque no lo haya experimentado igual que ustedes, más o menos se lo que se siente que te alejen de tu madre, no se que haría yo sin mi madre, escuché que te vendrás a vivir con nosotros al Inframundo, ¿Es verdad eso?

-Si, mi padre me lo pidió el día del entierro de mi madre-dije tomando de mi copa-claro, si eso no le molesta

-Al contrario cariño, me alegraría muchísimo, ya no me sentiría tan sola al ser la única mujer ahí que no sea un fantasma o una furia, mi estadía ahí ya no sería tan lúgubre como normalmente es

-Gracias por aceptar que me quedé con ustedes-dije haciendo una pequeña reverencia

-No debes hacer reverencias conmigo-levante la vista y vi que Perséfone me sonreía-a mi no me van mucho esas formalidades, solo cuando se ameritan

-Asi que tú eres la otra hija de Hades-dirigi mi vista hacia la persona detrás de Perséfone y vi a una mujer con vestiduras verde y en su cabeza reposaba una corona de hojas-querida, te ves muy delgada, debes comer cereales

-¡Madre! ¡Déjala en paz!-no sabía que hacer ante la muy incomoda escena entre Perséfone y la que parece ser Deméter-no la empieces a atormentar con tus cereales

-Pero Perséfone mírala, está muy delgada

-Madre por favor, no ahora-Demeter cedió ante su hija y detuvo su insistencia con que yo comiera cereales-presentate bien

-Esta bien, hola linda, soy Deméter-me di cuenta que en la voz de Deméter había una pizca de dessagrado-si me disculpan iré con mi hermana

-Perdona a mi madre, sigue odiando a Hades por lo que hizo hace muchos eones

-No se preocupe, estoy algo acostumbrada-dije frotándome el brazo nerviosa

-Bueno, yo paso a retirarme, felicidades y gracias por lo que hicieron por nosotros-Persefone se alejó de dónde estábamos y se dirigió hacia donde estaba Hestia

El resto del banquete transcurrió normal, comimos, algunos dioses nos felicitaron, las musas tocaron y cantaron hermosas melodías y todos lo pasamos bien, después de unas horas el banquete termino y nosotros debíamos regresar al campamento, salimos del Olimpo y nos subimos al elevador y regresamos a Manhattan, Argos nos esperaba fuera del Empire State, subimos a la camioneta y tomamos camino hacia el campamento, el trayecto fue algo silencioso puesto que ya estaba anocheciendo y todos estábamos algo cansados, al llegar al campamento decidimos que solo uno fuera a avisarle a Quirón que ya habíamos llegado mientras los demás regresaban a sus cabañas, y después de hacer ponernos de acuerdo, y por eso me refiero a un piedra, papel o tijeras, me tocó ir a mi ir a avisar que ya habíamos regresado, salimos de la camioneta y cada quien tomó su camino hacia sus cabañas y yo hacía la Casa Grande, al llegar toqué la puerta esperando a que Quirón atendiera

-¿Quién es?-Quirón abrió la puerta sacando solamente la cabeza-oh Melanie, eres tú ¿Y los demás?

-En sus cabañas, los dioses ofrecieron un banquete y por eso tardamos-dije metiendo mis manos en as bolsas de mi chaqueta-estamos cansados y por eso decidimos que solo uno viniera a avisar

-Claro, debí imaginarlo, es por eso que Dionisio no ha llegado, agradezco que su castigo aún no haya terminado y así no tenga que aguantarlo estando ebrio, de seguro subió en el banquete por no poder probar ni una gota de vino

-Si, no tenía buena cara al ver a los demás dioses tomando vino y el no-dije riendo al recordar cómo Ares se lo restregaba en la cara al señor D-bueno, solo venía a eso, nos vemos mañana Quirón, que descanse

-Tu también Melanie-me di la vuelta para comenzar a caminar hacia mi cabaña pero Quirón me detuvo-Melanie por cierto, mañana tu y los demás que falten quemarán sus sudarios después del desayuno

-Claro, yo les aviso a los chicos en la mañana-dije sonriendole, comencé a caminar hacia mi cabaña y antes de llegar me di cuenta de que había alguien afuera de la cabaña de Iris, me acerque y me di cuenta de que era Lyla-¿Que haces aquí afuera Lyla? ¿Creí que estabas cansada?

-Un poco, solo quería tomar algo de aire fresco-me senté al lado de Lyla y ella no dejaba de ver al cielo nocturno-James y yo solíamos formar figuras con las nubes y estrellas, voy a extrañarlo mucho Mel

-Lo se Lyla, tal vez no sepa lo que se siente perder a un hermano, mucho menos a un gemelo, y sinceramente no me gustaría experimentarlo, pero se lo que se siente perder a un ser querido, y aunque nos duela debemos seguir con nuestras vidas, Hazel me dijo que ellos siempre estarán aquí-dije señalando mi corazon-y te diré algo que entendí con esa frase, ellos siempre estarán a nuestro lado aunque no podamos verlos

-Tienes razón, gracias Mel

-No hay de que Lyla-dije sonriendo-creo que será mejor que entremos a nuestras cabañas, no creo que sea lindo que las arpías nos agarren

-No, descansa Mel

-Tu igual Lyla-entre a la cabaña y vi que Nico ya estaba dormido, tomé mi pijama, entre al baño y me la puse, salí y me metí a la cama y al momento de que mi cabeza tocará la almohada caí rendida