HUMAN| Detroit Become Human | Connor x OC

Todo tiene su fin.

Un año y un mes más tarde.

- Unas preguntas señora Fitcher ¿Cómo describiría su proyecto?

Estoy una rueda de prensa, ahora no se habla de humanos y divergentes, se habla de gente, estaba frente a ellos eufórica de presentar les el proyecto que llevaba meses trabajando.

- El centro de acogida Fitcher será un enorme complejo instalado en lo que fue una de las tiendas más grandes de Detroit de androides. Ahora que contamos con un sistema de adopción de lo que en su día dictamos como "divergentes", y de desarrollar otro tipo de objetos a los que si considerar máquinas, mi centro pretende proporcionar ayuda. A toda gente que no tenga donde ir, que quiera rehacer su vida, cualquier tipo de maltrato, niños sin hogar...

Me aclaro la garganta.

- En definitiva un refugio para todos, una esperanza para Detroit.- todos comienza a aplaudirme.- Gracias.

Me reúno con Hank y Connor, a este ultimo le doy un corto beso, desde que se calmo todo los casos de muertes entre sangres azules y rojas a disminuido. El teniente fue condecorado y está pendiente de acceso mientras que Connor...

- Teniente Fitcher.- leo su placa.- Me gusta como te queda mi apellido.- le abrazo.- Enhorabuena.

- A mi también, pero aun no hemos celebrado nuestra unión.- protesta.- Quiero vivir una boda en condiciones.- nos reímos.

- Me encargaré de eso.- le prometo.- Pero deja que antes te robe a Hank un momento.- asiente.

Llevo a Anderson hacía la entrada del edificio, observa que delante de él hay algo cubierto con una lona, arquea una ceja para luego quitar la lona. Se puede leer " En memoria de Cole Anderson y Lara Fitcher". 

- Ven a mis brazos.- no tardo en obedecer.

Habíamos formado una familia los tres, que ahora con este nuevo proyecto iba hacerse incluso más grande. Ese día por fin después de tantos años no solo visite la tumba de mi hermana, también la de mis padres, nunca me atreví a verla. Connor me acompaña y simplemente me rodea con sus brazos dándome el apoyo que necesito, al fin podía estar en calma.

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A veces yo termino antes el trabajo en el centro, y como todos los viernes les espero para tomar algo en el bar de Jimmy. Mis ojos ruedan cuando veo a Gavin Reed venir hacía mi con esa actitud de cretino, muy común en él.

- Me he mantenido este año alejado para no aceptar el cambio que sufrió Detroit, pero volví a ver todo de nuevo y habéis ganado.

- No se trata de ganar Gavin.- me interrumpe.

- Lo se, trato de decir solo que... Felicidades.- dice eso y se larga, ya es más de lo que podía pedir.

Hank aparece a los segundos me abraza, ya hacía un año que estaba sobrio y prácticamente nos habíamos convertido en familia. Tanto que ese día después del trabajo los tres nos dirigimos a comprar las cosas para Navidad, nuestra segunda juntos.

- Anne ¿Te has acordado de enviarle a North la invitación?- me pregunta Connor, estoy tan feliz pegando saltos que no le escucho.- Cariño...

- Connor aun estás a tiempo de romper tu compromiso y huir.- comenta Hank gracioso.- Si no será toda una vida de tortura.

- ¡Oye!- me quejo.

- Ves eso si lo ha escuchado, escuchan lo que les da la gana.- bufa el mayor, mi prometido se ríe. 

- ¿Qué te parece si le compramos pienso especial a Sumo?- señalo la comida del escaparate.

- ¿Mi perro va a comer mejor comida que yo? ¿Es esa mi vida de ahora?

- Es mi niño consentido, ya le hecho de menos y eso que le vi ayer.- nos reímos.- Además es Navidad.

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Día de Navidad.

Todos hemos abiertos los regalos, solo faltaban los de mi parte, estábamos sentados en círculo, Hank, Connor, Markus, North y yo. Les entrego una pequeña caja de música a cada uno, Connor me mira, es cómplice del lo que está a punto de suceder.

- Has sido invitado al enlace de Connor y Anne Rose Fitcher, para nosotros sería un placer que oficiaras la ceremonia.- lee Markus.

- Lo mio igual, pero siendo su dama de honor.- todos miramos a Hank, este comienza a llorar.

- Perdón, joder, joder...- deja a la vista lo que pone en su invitación, en ella pone que le pido que me lleve al altar, me lanzo a sus brazos.-  Anne...

- En teoría cuando ya los androides y humanos se unificaron, Connor y yo nos casamos para que pudiera tener mi apellido pero, fue tan frío, solo firmamos un papel. Quiero que sea especial, y quiero que forméis parte de el.

Me muevo a buscar a Sumo, le llamo feliz de que todos aceptaran mi propuesta.

- Ups, creo que Sumo encontró mi regalo para el ya...

Todos se asoman, vemos al perro recostado sobre una gran cama acolchada que le compre, nos ignora, prefiere disfrutar su regalo. 

Esa noche mientras todos duermen, salgo al jardín a mirar la noche, aun hay luces en la calle de familias celebrando. Connor se coloca a mi lado posando una manta en mis hombros, coloca un dulce beso en mi cabeza.

- A Lara y a mi nos gustaba la Navidad, el único día que nuestro padre se mantenía sano, mi madre parecía feliz, aparentábamos ser una familia normal. Me gustaría que me vieran ahora, mi propio centro, mi propia familia...

- Lo has logrado tu sola, si no llegas a estar, yo... quizás Cyberlife me hubiera destruido. Me enseñaste a no huir de la verdad.

- Curioso porque yo huía.- nos miramos.- Hace ya un año que nos casamos, ya era hora de la ceremonia, aunque me hubiera gustado que hubiera seguido el protocolo.

- ¿Protocolo?

- Te arrodillas, me declaras tu amor, planeamos la boda, nos juramos amor eterno. Hemos empezado al contrarío y saltándonos pasos.

- Puedo arreglarlo.- Connor me agarra las manos y sin dejar de mirarme comienza ha agacharse.- Eres el motivo por el que me levanto por las mañanas, necesito tu sonrisa, tus despistes, aprender cada parte de ti, y que juntos lleguemos hasta apagarnos.

- MMmmh.- me acerco.- Creo que podemos probar eso de "aprender cada parte de mi".- me agacho con él para besarle.- Te quiero Connor.

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