Capítulo 5

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Lena llegó a la clase más tarde de lo normal, pero nadie lo noto. Esta clase era a primera hora de la mañana y no era inusual que algunos alumnos llegan tarde.

-¿Te quedaste dormida?. -Preguntó el ojigris divertido, viendo como la chica llegaba con su usual vestimenta mal colocada y los ojos entrecerrados.

-Sip ¡Y como he llegado tarde me va a tocar hacer todo rápido y dañare el Veritaserum!

-No te adelantes, Snape y Evans han estado besandole el culo a Slughorn toda la mañana así que recien empezamos. - El chico señaló el primer paso y la chica sonrió con emoción. - ¿Como pudiste entrar a los EXTASIS de pociones?. - Pregunto el chico riendo.

Se escuchó un pequeño rugido y Sirius miró a su alrededor confundido.

-Pase raspando los requerimientos pero lo hice porque me parece interesantisimo, crear pociones mágicas con resultados mágicos. - Sirius alzó las cejas. - Tengo mucho que mejorar... pociones requiere de paciencia.

-Y se nota que tu no tienes.

-Lo que no tengo es tiempo. - La chica rio. - ¿Escuchaste la banda que te dije?

Sirius negó con la cabeza, mientras escuchaba otro rugido que parecía provenir del... estómago de Lena.

-Aún no.

-¡Tienes que escucharlos!

-Si, si lo hare. -Dijo el ojigris. - ¿Y como así me recordabas de haberme visto en los pasillos?

-Ah sí, te recuerdo por la camisa de Led Zeppelin que llevabas. - La chicos hizo como si sostuviera una guitarra.- Since I've been loving youuuu

-¿Seguro que no por nada más?. - Pregunto el oji gris sonriendo de lado.

Lena se atraganto, se puso roja como un tomate y empezó a darle vueltas al azar a su poción.

-¡Que! No, no.

Sirius se descoloco un poco por la reacción de la chica y aún más cuando apenas la clase hubo terminado la chica salió volando olvidándose de apagar el fuego del caldero.

Esta loca.

Sintió como su mejor amigo le pasaba un brazo por los hombros para caminar a su próxima clase.

-Hoy tu relajate y disfruta tu cita con Iris Zabini. - Le dijo James, poniendo cara de pervertido.

Remus y Peter soltaron un "uhhhhhhh" y Sirius reviró los ojos.

-Ni loco, ya te dije que hoy me voy a vigilar a Quejicus.

-¡Sirius no desperdicies tu oportunidad!. - Le soltó Peter con horror. - Cosas así solo pasan una vez en la vida.

Remus soltó una carcajada.

-Yo y James iremos a vigilar a los Slytherins. Tu tranquilo. Esa chica es una de las pocas que no has hechizado por mostrar interes en ti, asi que aprovecha este error por el que pasa tu cerebro antes de que se vaya y termines hechizandola.

Sirius soltó un bufido.

-No es ningún error, es la única chica lo suficientemente hermosa como para tentarme. - Ya habían llegado a la clase de Defensa Contra Las Artes Oscuras, y Sirius se dejó caer sobre la pared con aburrimiento.

-¡Perro desgraciado!. - Exclamó James sin creerlo. - Jocelyn Boken era hermosa también, la pobre terminó con un mocomurcielago...

-Tenía muy grandes los dientes, no gracias.

James y Remus se miraron negando con la cabeza y antes de que pudieran seguir atormentandolo, el se adelanto.

-¿Que tal las cosas con Evans?

Su amigo se enderezo y olvidando todo les hablo de las sonrisas que le había dedicado en clases de pociones.

Después de cena y tras la insistencia de sus amigos, Sirius aceptó a regañadientes irse a ver con Iris Zabini; No es que le desagrada la idea, es que habían otras prioridades. Llego antes de la hora dicha, con todas las intenciones de irse lo más pronto posible y encontrarse con sus amigos en las mazmorras.

-Hey. - Saludo, en cuanto la vio acercarse, se había dejado el cabello rubio suelto y llevaba una diadema negra, se la veía preciosa.

-Hola, Sirius ¿Que tienes planeado para hoy?

¿Planeado? ¿Se suponia que tenia que tener algo planeado?

Sirius se encogió de hombros.

-Lo que tu quieras.

La chica sonrió de lado y tomó el brazo de Sirius; guiandolo hacia un matorral poco transitado con una linda vista al lago y a las montañas que rodeaban Hogwarts. A Sirius le gusto bastante el lugar pero más le interesaba alejarse de ahi, asi que solo sonrió con la boca cerrada, apunto de decir que se le había olvidado que tenia un monton de cosas que hacer y que dejaran esto para otro dia, cuando sintió la mano de la chica sobre la suya.

-Eres muy tímido. -Le susurro la chica al oído.

Sirius volvió la cara hacia la rubia y la vio muy cerca con una sonrisa inocentona plantada en los labios.

-No realmen...

Un beso suave fue depositado en sus labios.

Sirius se separó con sorpresa, viendo el rostro de la chica adquirir un tono rojizo.

- Quedemos para otro dia, tengo cosas que hacer. - Murmuró el chico, saliendo el lugar lo más rápido posible.

Losing control | MaraudersWhere stories live. Discover now