Capítulo 17.

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Gracias a la ayuda de la albina, pudieron hacer un túnel en el que los llevaría directo con Invierno, claro que iluminados por el Joven Dios, Jack no podía evitar sentirse un poco incómodo con los cariños que se daban entre sí aquellos jóvenes.

- Es mucho azucar para mí.- Dijo Jack con una sonrisa burlona.

- Sólo estoy disfrutando algo que quise hacer desde hace tiempo.- Dijo Tom para luego darle un beso en la mejilla a la albina.- ¿Acaso te molesta mi lindo cubito de hielo? - Pasó suavemente el borde de sus labios por las mejillas.

- Para nada mi linda fogatita.- Acarició las mejillas del contrario.

Jack hizo un gesto de asco que simulaba vomitar.

Pero pudo mantener la compostura, ya que vió como las ropas de Norte comenzaban a congelarse.

- Hay que darnos prisa.- Dijo Jack.

El joven Dios y Eira asintieron al ver la cara de preocupación del albino, la joven le devolvió la mirada a su prometido ya que no podía creer aún que su Rey haya hecho que el mundo estuviera en peligro.

- Los demás en el palacio creen que tú ayudaste a Invierno.- Dijo dándole la espalda a Jack.

- No lo hice, me usó para conseguir lo que quería.- Negó con la cabeza.

- Pero, ¿Cómo?.- Cuestionó Eira deteniendo su paso y el de los demás para escuchar la respuesta del albino.

Jack se sintió un poco incómodo al ver que todos lo observaban con un semblante decaído, pero se trataba de Solari y en el fondo creía que tenía que aclarar las cosas para evitar confusiones.

- Ella y yo ... estábamos discutiendo ... no era sobre algo importante, pero en la ceremonia Invierno se me acercó a decirme que no confiara en Solari ... que era peligrosa para mí y en cualquier momento me atacaría cuando tuviera la oportunidad.

Daba una pausa para apretar cada vez más fuerte su cayado, pero lo que no sabía era que estaba congelando la nieve del suelo donde él estaba parado.

- Tranquilo Jack ...- Dijo Norte tratando de alcanzarlo con su mano.

- Es sólo que nunca debí desconfiar de ella, exageré demasiado las cosas ... y pudo controlarme gracias a eso ... ¡Solari está congelada por mi culpa!

El albino sintió presión en su torso y unas manos pasaban por su espalda, era Norte que trataba de consolar al albino.

- Jack no es tu culpa, es de Invierno ... no intentes culparte por una rivalidad que lleva siglos en pie.- Acarició sus cabellos a medida que hablaba con un tono dulce.

- Jack apenas nos conocemos.- Se acercó el joven Dios.- Pero sé que Solari aunque siempre se quejaba de tí, parecía estar un poquito ...-Intentó encontrar la palabra correcta.- Fascinada contigo, por tu espíritu libre.

- Es porque es revoltoso.- Dijo Conejo en un tono burlesco.- Pero es el mejor en su trabajo como Guardián.- Dijo viendo a los ojos al albino.

Norte se separó tomando por los hombros a Jack para verlo de frente.

- Jack tú eres el único que puede remediar la situación, porque eres un revoltoso.- Sonrió.- Un héroe.- Los demás hicieron una ronda al rededor de ellos.- Un espíritu libre ... eres Jack Frost.

Las palabras de Norte ayudaron a Jack a salir de ese remolino de pensamientos negativos que tuvo desde el congelamiento de Solari, con el apoyo de sus amigos, ahora sabía perfectamente que esto no era su culpa y haría todo lo posible para remediarlo.

- Meme ...- Dijo Conejo llamando la atención de los demás.

Al ver al pequeño, se percataron de que su cuerpo se estaba congelando rápidamente.

La Diosa del Sol [Jack Frost X Tú]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora