Meraki

Capitulo 14

El desayuno fue rápido. Cuando kaede se levantó ella empezó el desayuno y el olor levanto a los demás, incluyendo a kagome y los niños, aunque solo hakudoshi se levantó cuando su madre lo hizo. Al terminar de comer rápidamente tomaron las cosas que kagome había empacado y después de una despedida rápida a kaede se fueron

"¿a cuántos días está la aldea la que vamos?"

Inuyasha miro de reojo a shippo y respondió con pereza

"dos días, y serán más si descansamos a cada rato"

Lo último que dijo era una pequeña amenaza, no pararían hasta que estuvieran lo suficientemente cerca de la aldea. Cuando lo escucharon el grupo inmediatamente gimieron con molestia y resignación, kirara incluso movió sus colas con molestia y silbo suavemente expresando su molestia

"haremos lo que podamos, pero si necesitamos descansar lo haremos inuyasha, sin importar lo molesto que estés"

Molesto inuyasha miro a sango quien alzo una ceja con arrogancia, y kagome sonrió con diversión al escucharla. Ignorando la discusión que se estaba formando en el grupo acaricio a entei que troto hasta estar a su lado

"si te cansas puedes montar a entei" Hakudoshi tomo su mano mientras hablaba "él no se cansara incluso si camina por dos días enteros cargándote"

Le dijo con un susurro, mientras entei alzaba la cabeza con orgullo, incluso relincho un poco estando de acuerdo con las palabras de su pequeño amo. Kagome miro a entei divertida y palmeo su espalda con gratitud

"tienes razón, es muy fuerte" aparto la vista de entei y miro a hakudoshi "has escogido a un buen compañero"

Entei restregó su cabeza contra la suya sintiendo alegre, y hakudoshi asintió estando de acuerdo con las palabras de su madre. Shippo sintiéndose celoso y algo molesto de ser ignorado corrió hasta kagome y salto a sus brazos. Hakudoshi le dio una mirada molesta y él le saco la lengua al sentirse seguro teniendo a su madre como escudo

Alegre sostuvo a su pequeño zorro, y sujeto la mano de hakudoshi cuando el alzo su mano esperando que ella la tomara. Parecía que iba a ser un día agradable y tranquilo

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Se había equivocado totalmente, un par de horas después de dejar la aldea fueron atacados por varios demonios. Ella tuvo que montar a entei junto con shippo y mientras el corría alrededor del campo de batalla ella disparaba flechas a todos los demonios que podía teniendo cuidado de no herir a nadie

Hakudoshi estaba cerca de ella matando a cada demonio que se acercaba demasiado con su lanza. Sango y miroku montaron en kirara e inuyasha corría por todos lados blandiendo su espada con fuera. Ahora que la joya estaba casi terminada los ataques de demonios eran más frecuentes que antes

"maldita sea, esto si es molesto"

Inuyasha sacudió su mano llena de sangre y kagome se apartó de el no queriendo terminar sucia. Aunque el kimono era fácil de limpiar al ser piel de demonio, prefería no ensuciarse

"¿esto significa que podremos descansar?"

Inuyasha iba a negarse, pero al ver las expresiones esperanzadas de los humanos de su grupo suspiro y asintió. Incluso creo sentir las miradas puntiagudas de kirara y entei, tal vez si había sido buena idea descansar

"creo que es mejor si empezamos a comer, más tarde no tendremos oportunidad"

Miroku sugirió mientras se sentaba y sacaba de las bolsas llenas de comida que kaede les había empacado por la mañana. Ignorando a los demás empezó a comer, haciendo que sango lo mirara con molestia

"tiene razón, es mejor comer antes de que inuyasha quiera empezar a caminar de nuevo"

Shippo hablo rápidamente mientras sacaba un par de bolsas y regresaba a kagome dándole una con una gran sonrisa orgullosa

"gracias shippo" palmeo su cabeza y luego miro a hakudoshi "¿quieres comer?"

El negó rápidamente con la cabeza mientras se recargaba en el costado de entei

"si tienes hambre, dímelo"

Estaba un poco preocupada por su falta de apetito, pero inuyasha siempre le decía que los demonios no necesitaban comer tan seguido, así que eso la aliviaba un poco

Descansaron un par de minutos mientras comían, y antes de darse cuenta inuyasha ya quería seguir avanzando. Con resignación se levantaron y empezaron a caminar siguiéndolo como si fueran a alguna clase de sentencia

Al resto del camino kagome cargo a shippo y también a hakudoshi por momentos antes de que tuvieran que montar a kirara y entei para poder descansar un momento, ya que inuyasha no quería detenerse

"inuyasha, será mejor que nos detengamos un momento par descansar"

Al escuchar a kagome, inmediatamente negó con la cabeza

"no, caminemos un par de horas más, antes de que anochezca"

Haciendo varias muecas y gimiendo con cansancio terminaron aceptando sin muchas quejas. Sabían que en cuando él los dejara descansar podrían dejarse caer al suelo y terminarían quedándose dormidos al instante

Hakudoshi por su parte no estaba muy feliz por el arreglo, pero acepto solo porque entei estaba cargando con su madre y no estaba tan cansada. Kagome alzo la vista al cielo viendo como estaba empezando a oscurecerse, y como si escuchara sus pensamientos inuyasha se detuvo y os miro

"es hora de que acampemos" escucho los suspiros de alivio de su manada y sonrió "mañana llegaremos a la aldea"

Saltando sobre la rama de un árbol, se quedó ahí viendo como su manada empezaba a sacar sus mantas para dormir, estaban más cansados que hambrientos al parecer. Hakudoshi vio cómo su madre se dejaba caer en su cama improvisada y antas de darse cuenta ella cayo dormida. Un poco sorprendido, giro su rostro para ver a inuyasha y lo miro con odio, a lo que él le enseño los colmillos con molestia para luego ignorarlo

Aun sintiéndose molesto se acercó a su madre y se acurruco contra su pecho viendo de reojo a entei que se recostó al lado de ellos. Pudo escuchar como shippo se acercaba a kirara y sonrió un poco alegre, esa noche él tendría a su mama solo para el

Antes de caer dormido, abrió sus ojos de golpe y alzo su cabeza para ver el bosque, había algo ahí. Con cuidado se levantó un poco pero no se separó de su madre, incluso entei estaba viendo el bosque ahora

Tenso mantuvo sus ojos en el bosque, y entonces lo vio. Sus pupilas se dilataron y una sensación de vacío y miedo lo envolvió, ahí, ocultas en la oscuridad de la noche estaban un par de avispas de naraku

Mantuvo sus ojos fijos en ellas, y cuando estaba a punto de levantarse las avispas se retiraron lentamente sin hacer ruido. No hubo ninguna amenaza, ni palabras intercambiadas, solamente anunciaron su presencia y se fueron, pero eso había sido lo más aterrador

Apretando los dientes con fuerza, aparto la vista del bosque y miro a su madre, antes de acostarse nuevamente y acurrucarse lo más cerca que podía de ella. Ver a las avispas solo le dijo lo que ya sabía. Le quedaba poco tiempo de vida. Naraku solo estaba burlándose de el al mostrarle las avispas, anunciando que sabía dónde estaba y que podía hacer lo que quisiera en cualquier momento. Eso lo asustaba y lo molestaba. Aun no quería morir