NUEVE

113 18 0
                                    

— ¿Entonces, como estuviste estos días?

Theodore cruzo miradas con su psicóloga. Con los ojos un poco entrecerrados, jugando con el almohadón que había tomado de alguno de los sillones. No había estado mal, la verdad que no se había vuelto a meter en problemas en el instituto. Y el sueño estaba comenzado a mejorar, de a poco. Sin nada de medicinas. Miro al techo, y sonrió.

—He subido la calificación en Geografía. —La doctora Guzmán lo miro con las cejas levantadas y garabateo algo en su libreta, algo que él no pudo leer. — ¿Lo que escribió es bueno verdad?

—Puedes quedarte tranquilo.

—Bueno... —Aclaro su garganta y puso su cuerpo firme. — Como le decía, subí mis calificaciones. En realidad hace poco me entere que existía esa materia. —Admitió y sonrió. —Vengo un poco atrasado, en realidad no me gusta ir a la escuela.

— ¿Por qué no?

Se encogió de hombros.

— ¿Por qué debería gustarme? Tengo que pasar como cinco o seis horas rodeado de gente idiota —Bufo, despeinando su cabello. —Tuve intenciones de abandonar el instituto a principios de año pero mi madre me lo ha impedido.

—Mejor que lo haya hecho, necesitas estudiar.

—Tampoco es como que sirva para algo...

— ¿Hay algo más sobre lo que quieras contarme?

La miro y dudo, no estaba seguro si empezar a hablar sobre su nueva amiga. Y las horas que estaba pasando acompañándola a ensayar en el salón de baile, mientras la estrella brillaba él se quedaba sentado en un rincón mirando con admiración.

—Creo que no...

—Está bien, no voy a obligarte a hacerlo si no quieres.

— ¿Por qué dice eso? —Pregunto, desconfiado. — ¿Se ha enterado de algo?

La mujer negó.

— ¿Por qué te preocupa que me entere o no?

Theodore levanto una ceja, confundido.

—Porque si lo sabe pues entonces quizás le cuente, pero si no...Preferiría no hablarlo por ahora. —La mujer se acomodo mejor en el sofá y cerro la libreta. Mirándolo pacíficamente. —Oh maldición está bien si usted insiste...

La doctora Guzmán se rio.

—No he hecho nada, Theodore.

—Estoy conociendo a alguien. —Las palabras salieron de su boca, sin siquiera pensarlo dos veces. —Es decir, solo somos amigos. No me mal entienda.

—Tranquilo... ¿Y te sientes bien con ello?

Asintió.

—Es bueno, porque me siento cómodo y yo nunca me siento cómodo en ningún lado.

—Es bueno saberlo, Theodore.

—Se llama Madeleine.

La mujer, sonrió internamente. Satisfecha de confirmar finalmente sus sospechas.

—Me alegro de que te sientas así, Theodore.

—Sí, aunque yo...—Suspiro. —No puedo determinar si lo bueno dura para rato ¿Sabe?

— ¿Por qué dices eso?

—Por nada en especifico...

Lᴀs ᴘʀᴏᴍᴇsᴀs ᴅᴇ ᴛʜᴇᴏᴅᴏʀᴇWhere stories live. Discover now