Spideypool "Yo también quiero ser un héroe"

Deadpool

Por las oscuras y frías calles New York la policía perseguía a un grupo de hombres que acaban de asaltar un banco.

Los sujetos escapuchados conducían una camioneta negra algo deteriorada. Sin algún tipo de cuidado quitaban cualquier obstaculo de su camino, con tal de no ser atrapados.

Parecía que la justicia estaba por perderlos, cuando de repente una silueta muy conocida paso por encima de aquella patrulla.

-¡Pero si es el hombre araña!- grito uno de los oficiales.

Todos los presentes alzaron la mirada, observando como el heroe de la ciudad se balancea por los edificios acercandose al vehículo de los ladrones.

Ya cuando estaba a unos cuantos metros, el chico aracnido lanzo sus telarañas hacia las ruedas, haciendo que el carro derrapara hasta estrellarse contra un muro.

A los pocos segundos los abusivos salieron para darle la cara a su enemigo.

Y de un salto el menor aterrizo enfrente de sus oponentes.

-Buenas noches señores- saludo el hombre araña alzando la mano.

De inmediato los asaltantes sacaron sus armas.

-Miren podemos hacer esto por las buenas, ¿que les parece si se entregan y asi todos nos podemos ir a dormir?-

-¡Traga plomo asqueroso insecto!- grito el lider del grupo.

Los disparos comenzaron, haciendo retroceder al aracnido, obligandolo a buscar una mejor estrategia.

Pero como era de esperarse, en cuestión de minutos casi todos habían sido derrotados.

Tiro al suelo a dos sujetos tratando de inmovilizarlos con su telaraña, parecía que ya había terminado, pero su sentido arácnido le advirtio de un nuevo peligro.

Detrás de él, uno de los sujetos de negro le apuntaba directo a la cabeza.

-Fuiste muy descuidado niño- sonrio el mayor.

El hombre araña paso saliva nervioso, estaba por girarse pero un fuerte ruido lo dejo extrañado.

Al darse la vuelta se quedo en shock al ver que su agresor estaba tendido en el suelo con una enorme cortada en la espalda. Se arrodillo y con cuidado inspeccionó la herida.

"Es un corte bastante extraño, como si una espada lo hubiera atravesado, gracias al cielo no es profundo" penso el heroe sintiendo un poco de miedo, no vio a nadie cerca en toda la pelea.

Se levanto del piso con rapidez, girando su cabeza hacia todos lados tratando de allar al sospechoso, pero no vio a nadie.

A lo lejos, escondido entre las sombras, una enorme figura se sacudia las ropas mientras guardaba su afilada arma.

-jejejeje nadie toca a mi dulce arañita- murmuro aquel extraño.

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Tras una larga noche, el chico araña regreso a su departamento, entro por la ventana tratando de no hacer ruido, pues sabia que en el cuarto de al lado su tía dormia.

Se quito su traje guardandolo en el closet, tomo una pijama del cajón y de golpe se dejo caer en el colchón.

Estiro su brazo tratando de tomar su alarma, pero el sueño lo vencio.

A la mañana siguiente la tía May se levanto con mucha energía, fue directo a la cocina con la intención de preparar un desayuno muy especial, pues ese día por fin su pequeño sobrino entraría a la universidad.