Capítulo 12 ¡Eres Mía!

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Estoy de regreso mis bellas lectoras (jamas las he visto en mi puta vida, pero para mi todas son hermosas) * - *

¡Aquí les dejo lo que tanto pidieron en sus comentarios + una sorpresa al final!

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Capítulo 12 ¡Eres Mía!

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¡Mía!

La palabra se repitió una y otra vez en la mente de Izumi como si fuera un eco, uno con la voz de Itachi.

Su último recuerdo era haber aceptado las palabras de Ino sobre pasarlo bien, bailar y olvidarse de Itachi y su continuo rechazo. Izumi bailó una vez y luego otra con un tipo que ni conocía, no sé cómodamente en esos brazos pero dio lo mejor de ella para disfrutarlo.

Lo obtenido minutos después, su cuerpo se relajo y se rió de algo que dijo su compañero de baile, el humano era guapo y divertido, su intento de coqueteo fue torpe pero bien recibido por Izumi. Debía admitir que le gusta sentirse deseado por alguien, aunque fuera inútil, él no era su compañero.

Y puede que nunca lo encuentre ...

Su línea de pensamiento fue cortada de arrepentimiento, por el ruido de la puerta al abrirse de golpe. Como una tormenta el lugar fue impregnado por el olor de un alfa dominante. El baile se detuvo y todos con una nariz y un instinto de supervivencia se volvieron hechos la causa de aquel olor.

Izumi suelta un jadeó y se aparta de los brazos que la sujetan, su pecho se salta un latido cuando la roja mirada de Itachi se centra en ella. Su piel hormiguea y sus sentidos se agudizan haciéndola marear por un segundo.

Caliente.. caliente.. su interior arde.

Itachi se quedo ahí, mirándola en silencio y respirando con dificultad. Él aparta la mirada un segundo y mira al hombre a su lado. La música se detiene y todos escuchan perfectamente el gruñido/rugido que sale de él.

Izumi da un paso hacía el inconscientemente, su corazón acelerado. A diferencia de muchos a su alrededor ella no siente miedo de él, sino otro sentimiento distinto.

—¡Mía! —Grita Itachi y antes de que cualquier persona pudiera moverse esta sobre Izumi.

Él la levanta y la atrae hacía su fuerte cuerpo. Izumi rodea con las piernas su cintura y apoya las manos en sus hombros intentando equilibrarse. El ruido de pasos acelerados se escucharon a su alrededor, pero ella lo ignora, demasiado concentrada en el cuerpo pegado al suyo.

Antes de que pueda decir nada, siente a Itachi enterar el rostro en su cuello, él la olfatea, su lengua caliente recorriendo su piel desnuda.

—¡Ah! —Gime cuando Itachi muerde su cuello, fuerte.

Apretando su camisa entre las manos, espera sentir dolor, pero todo lo que encuentra en ella es deseo. Una corriente la recorre hasta la punta de los pies haciéndola cerrar los ojos de puro placer. Gimiendo empuja su cuerpo contra él, restregándose. Su cuerpo demasiado caliente y necesitado.

Cuando él empuja contra ella y siente algo duro chocar contra su vagina, Izumi gime y se deja ir. Demasiadas emociones dentro de ella. Cuando vuelve a la realidad, siente la lengua de Itachi lamer el lugar donde la marco.

—Mía —Dice Itachi contra su piel.

Izumi abre los ojos y nota para su completa vergüenza a todos en el bar observándolos. La realidad la golpea con fuerza.

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