Elisabeth estaba sentada en una roca esperando, diez años debia esperar para reencontrarse con su amor, su vida... William Turner, lo echaba tanto de menos, pero para ella merecia esperar diez años solo para tenerlo un dia a su lado.
Ella estaba sumergida en sus pensamientos, los momentos felices que tenia con Will, miro a su lado el pequeño cofre donde estaba el corazón de su marido, sonrió al recordar lo que le dijo Will ''esto es tuyo, cuídalo'', el corazón de Will le pertenecia a ella.
Después de un tiempo, empezó a recordar a una persona, Jack Sparrow, su otro amor, aquel pirata cobarde, rastrero y loco al que llamaba amigo, recordó cuando Barbosa los dejo abandonados en aquella isla.
Recordó cuando bebieron y bailaron alrededor del fuego que hicieron en la playa, Elisabeth recordó que, a pesar de estar condenados en esa isla, nunca se había sentido tan libre, cuando estaba con Jack, su vida se volvía libre y con un poco de peligro.
Recordó cuando lo encadenó para que el Kraken lo matase y poder salvarse ella, Will y los demás, le dolió mucho dejarlo allí, pero no estaba arrepentida, era para salvar a Will, que a pesar de amar a Jack, ponia a Will mas alla que todos los demas, incluido Jack.
Elisabeth despertó al atardecer, cuando escuchó gritos y un barco desembarcando cerca, ella miro hacia donde venia y solo vio la bandera del navió, una calavera negra, piratas, se armó con la espada y el cofre y se adentró en la jungla, tenia que proteger el cofre y no podía fiarse de los piratas.
Se escondió detrás de un árbol y espero, empezó a escuchar unos pasos, era solo una persona, cuando lo sintió mas cerca, salió de su escondite y levanto la espada apuntando al cuello de esa persona.
Elisabeth se quedo de piedra cuando vio de quien se trataba.
-¿Jack?.- dijo esta.
-Señorita Swan.- hizo una reverencia Jack.
-¿Que haces aquí?.-
-¿Es lo unico que se te ocurre decir despues de tantos meses?, pues veras...- alejo con dos dedos la espada de Elisabeth de el.-... llevamos dos meses en mar abierto, y mi tripulación y su capitán necesitan descansar.-
Elisabeth se quedo mirando sus ojos, aquellos que hacia seis meses que no veia, y aquellos que tanto les gustaban.
-Y ahora, señorita Swan, ¿que haceis vos aquí?.-
-Vivo aquí.-
Jack frunció el ceño extrañado.
-Espero a que llegué Will dentro de diez años.-
-¿Esto es lo que el gran capitán del Holandés Errate os proporciona?.-
Elisabeth se quedo callada un poco irritada.
-Es broma, cariño. Se que el joven Turner no puede pisar tierra hasta dentro de nueve años... y medio.- sonrió Jack un poco.
Elisabeth se do cuenta de que eso alegro un poco a Jack, o mas de lo que ella pensaba.
