(処理) ⋮ 𝟎𝟕

4.4K 568 367
                                    

𝐕𝐎𝐋𝐊𝐎𝐕 ⇣ 𝟎𝟔𝟎𝟒

𝐕𝐎𝐋𝐊𝐎𝐕 ⇣ 𝟎𝟔𝟎𝟒

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

-esto no es parte de mi contrato -hablé en voz baja para que el dueño de la casa no nos escuchase, probablemente estaría rondando por el comedor debido al sonido de sus zapatos

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

-esto no es parte de mi contrato -hablé en voz baja para que el dueño de la casa no nos escuchase, probablemente estaría rondando por el comedor debido al sonido de sus zapatos. -ni siquiera me cae bie-

La puerta abriéndose me hizo sellar los labios para ponerme rígido ante la figura recién mostrada, horacio estaba en el marco de ésta primera vistiendo un tierno pijama de colores pasteles mientras se devoraba unas patatas fritas que venían en bolsa. Conway había decidido venir a visitarlo por la recuperación costosa de sus piernas, trayéndome a mi de muñeco para poder acompañarlo y así que nadie pensase que justamente haríamos lo que estábamos haciendo.

El chico de cresta miraba confuso mi cuerpo, como si no se creyese que estuviese parado en su departamento de baja calidad, luego intentó ver más allá de este, y cuando se encontró con mi superior tras mis espaldas, ignoró por completo mi presencia y se lanzó a sus brazos. -¿pero qué coño? -fruncí el ceño, nunca había visto una escena tan familiar, y menos en donde el protagonista fuese conway.

Los brazos del superintendente estirándose para acariciar la enorme espalda de horacio me dejó perplejo y un poco incómodo, me hacía sentir muy externo a la burbuja que crearon en tan pocos segundos, pero tampoco me importaba mucho, el chico de cresta no me caía tan bien todavía, al menos ahora lo aguantaba.

Entraron juntos mientras hablaban como si no se hubiesen visto en años, siendo que ayer mantuvieron contacto a través de una llamada de más de una hora, y lo sabía perfectamente porque yo le tuve que manejar el coche mientras él se pegaba al teléfono para escuchar mejor. Se sentaron en el sillón más grande que adornaba la sala de estar, yo me quedé de pie en la entrada de ésta, esperando alguna indicación para poder sentarme a gusto.

-comisario, puede sentarse acá.

Cuando vi su palma golpeando el asiento que estaba a un lado de él, negué con mi cabeza. -si es así prefiero quedarme de pie, muchas gracias por la hospitalidad.

Y me arrepentí tanto de decir eso, porque así estuve más de quince minutos, con la espalda acolchándose en la incómoda pared verde lima mientras los veía tomarse una café y hablar de la vida. Me causaba un poco de risa esta situación, pues al fin le sacaría algo a conway en nuestras absurdas peleas de quien era mejor, ya que no se le ve muy profesional ahora, acariciando disimuladamente la mano de horacio mientras éste le daba las gracias por algo de lo que no me había enterado una mierda.

infiltrate ; volkacio Where stories live. Discover now