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La oficina se hallaba en completo silencio. El único sonido perceptible era la lapicera presionando sobre el papel, firmando contratos y completando papeleo importante.

Allí estaba él, con su traje negro perfectamente planchado, con su ajustada corbata roja y un ceño fruncido adornando su rostro. Sí, el mismísimo Jeong Jaehyun. El sexy jefe francés para el que cualquiera desearía trabajar.

Jeong Jaehyun es el dueño de la marca de labiales Cherry; una marca muy conocida alrededor del mundo, la cuál tiene las cualidades de siempre ser de una gama rosada y oler fuertemente a frutos rojos.

Jaehyun estaba orgulloso de su producto y orgulloso de los resultados que tenía. Millones de personas alrededor del mundo utilizaban éstos lápices labiales que, al parecer, nunca dejarían de ser parte de las más fabulosas tendencias.

Ahora mismo, Jaehyun estaba terminando de rellenar un aburrido papeleo de la empresa: confirmando promociones, exportaciones del producto y otras cosas más.
Trabajaba sumamente concentrado en los papeles que debían ser terminados urgentemente para ese día, hasta que unos golpes en la puerta lo hicieron levantar la mirada.

— Pase —respondió a los golpes, con un exquisito acento francés.

Su secretaria entro con timidez por la puerta, con unos papeles en su mano. Se ajusto los lentes y carraspeó un poco, un tanto nerviosa. Luego de años trabajando con Jeong Jaehyun, todavía no se adaptaba del todo a su ambiente poderoso que había en las oficinas de trabajo.

— Señor —dijo con voz algo temblorosa, caminando entre pequeños tropezones hacia Jaehyun. Él era un hombre frío e imponente. Su presencia lograba ponerte nervioso y erizarte cada vello de la piel—. Me enviaron del equipo de promoción para hacer un comunicado.

Dis moi, mademoiselle [digame, señorita] —Pidió con ese acento francés tan jodidamente sensual, expresando la letra "D" de una manera simplemente perfecta.

La secretaria tragó saliva—. El equipo de producción quiere traer a un famoso modelo, para que publicite y modele para la marca, pero necesitan su aprobación. Su nombre es...

— El nombre no importa, mademoiselle, muéstreme una fotografía del chico y lo decidiré —interrumpió con rapidez. La secretaria casi muere de excitación al escuchar la palabra "fotografía" con esa voz tan deliciosa. Era como una suave caricia de terciopelo para el oído.

— E-está bien —accedió la secretaria. Se acomodó nuevamente los lentes y se puso a buscar entre los papeles que traía una foto del modelo al que querían contratar. Al encontrarla, se la extendió a Jaehyun—. Está es.

Jaehyun tomó la fotografía, la sacudió un poco y la observó. Sus ojos se abrieron enormemente al ver al joven de la foto. Tenía el cabello acomodado de una manera en que lucía como el más bello y adorable del mundo, unos ojos grandes y brillantes, una sonrisa encantadora, y lo mejor para su deleite... Unos labios perfectos para utilizar los labiales rosados, acompañados de un par de lunares. El chico era una obra de arte por dónde lo veas.

La secretaria se quedó algo incómoda al ver cómo Jaehyun se quedaba completamente embobado con la imagen. Carraspeó un poco para conseguir su atención y habló.

— ¿Quiere hacer publicidad con él o prefiere no hacer na...

— Envíale un mensaje en éste instante, yo me encargo de su viaje hasta París y el lugar dónde se va a hospedar —la interrumpió a una velocidad impresionante, sin levantar la vista de la fotografía. La secretaria se sorprendió de lo rápido que tomó su decisión.

— Está bien, señor. Me encargaré personalmente de hablarle —dijo la secretaria con una sonrisa. Extendió la mano en señal de que Jaehyun le devolviera la fotografía. Él la miró y volvió a ver la imagen, con aspecto aburrido.

— Creo que me quedaré con la imagen, mademoiselle. Me gustaría seguir... Viendo sus detalles —anunció con una voz tan fría que estremeció a la secretaria, y también hizo que le extrañe un poco la decisión de su jefe.

— Está bien, señor, con su permiso, me retiro —se despidió y Jaehyun murmuró un "Merci" antes de que la secretaria salga por la puerta y la cierre con suavidad.

Jaehyun seguía espectando la imagen del modelo. Era realmente hermoso, era realmente... Caliente.

Todo lo que la marca y él necesitaba.

— Eres tan sexy, niño. Tú y yo nos llevaremos muy bien —susurró para sí, con una sonrisa maliciosa y descarada abarcando su rostro.

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⚠️ Cuento con el permiso de la autora para poder adaptar este fic corto a otra pareja, por lo cual, absolutamente todos los créditos corresponden a ella ; @hazzieangel ❤️

Cherry ♡ | JaeYong [Adaptación]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora