el niño del cafe

de nadie

(...)

Maldita su suerte que al salir se toparon con una profesora..

- señor.. hamada? Que hacia metido ahi?

- q-que yo? A nada solo.. ayu..daba a mi amigo a.. a

- a buscar mi uña de guitarra- interrumpio Miguel, sorprendiendo al nipon- choque con unos chicos y axidentalmente tire mi uña, hiro solo me ayudaba a buscar pero atascamos la puerta, le pido una disculpa- vaya parese que el niño es buen actor

La profesora no parecia del todo convensida a pesar del ligero sonrrojo del moreno, no notos rastros de que estubieran haciendo otras cosas, por lo tanto solo les llamo la atencion

- lo siento Miguel...- su rostro se mantenia serio, pero algo desia que su disculpa era real

- no te preocupes, no paso nada.. tengo que irme...

- toma tus Inhibridores... te acompañare a la entrada...

- no es nesesario yo, yo me se el camino..

- hay muchos alfas que pueden llegar a ser ostiles, tomara un tiempo para que Inhibrido haga efecto, y es lo menos que puedo hacer

Se quedo callado, era verdad su celo no se iria tan rapido ademas era mejor ir acompañado a aguantar las miradas acosadoras que la gente conciente o inconsientemente le daba, asi que acepto, solo... seria por esta ves

Viendo el lado positivo, se alegraba de covivir mas con el mayor, aun tenia como meta hacerse su amigo

- y, entonces... que edad tienes?

- 17...

Aunque el nipon no paresia aportar mucho para lograrlo..

- y.. estudias aqui?

- se...

- wow genial, y que carrera estas estudiando?

- ... ninguno en general... la universidad es un buen apoyo para explorar mas las capasasidades de cada quien...

- vaya... me sorprende que a tu edad ya seas un universitario, mi primo tardo mucho para lograr entrar a una, y eso que no es una muy buena, aunque es extraño que no se supone que a la universidad se entra a los 18?
Y tu tienes 17, o aqui las cosas son diferentes por que en mexico..

- por que hablas tanto?- solto repentinamente sorprendiendo al moreno

- ... lo siento.. solo tenia curiosidad es todo...

-...

El camino volvio a ser silencioso, la incomodidad volvio, pero aparentaban estar tranquilos, ambos continuaron su camino, miguel no podia evitar mirarle, (acaso siempre lleva esa misma cara? Con la señora de hace rato el paresia nervioso...) penso caminando tranquilo a un lado del pelinegro, llegaron a la entrada, ya era un poco tarde, lo que explicaba el por que esa parte se encontraba bastante solitaria

- muchas gracias por acompañarme Hiro...

- como sea- dijo dandole la espalda

- a-adios, nos vemos despues...- el nipon ni siquiera le volteo a ver, solo avanzo silencioso haciendo un ademan con la mano