Narra Antonella
Hace días que estoy en mi casa y no salgo para ningún lado, mis amigas viene pero solo me retan y me canso de escucharlas y terminamos peleando, siempre la misma razón, Paulo, que él no es bueno, que él me lastimo, que nunca lo voy a superar y cosas así, pero yo confió que en algún momento voy a dar vuelta la página, o eso espero, sé que mis amigas no me lo dicen de mala onda o parta lastimarme, solo quieren que me de cuenta lo que él causa y lo que lastima en mí.
-Quién es? - pregunté
-Delivery- dijeron del otro lado
-Yo no pedí nada- dije extrañada
-Acá dice un pedido para la señorita Antonella Cavalieri- miré por el agujerito de la puerta, Iván.
-Estoy segura de que no pedí nada- dije sonriendo
-Me contaron que le gusta el sushi y justo pasé por el mejor lugar de sushi- dijo
-Pasa- dije apartándome de la puerta
Arreglé la mesita del living y colocamos la comida ahí,
-Cómo supiste donde vivía y que me gusta el sushi? - pregunté
-Tengo mis contactos- dijo y me guiñó un ojo
-Querés que ponga una peli? - asintió- El stand de los besos? - pregunté
-Eso es para adolescentes- dijo riendo
-Desde cuando las películas tienen hasta una edad? - pregunté y rio- dale mírala, te va a gustar-
-Bueno dale- puse la película y comimos el sushi.
-Te gustó? - pregunté cuando terminé
-Esta muy buena, es más para adolescentes, yo ya estoy grande- dijo
-Perdón señor grande- dije y rio- yo amo ese tipo de películas
-Románticas? - preguntó
- Y para adolescentes- dije y rio
-Igual sos chica- dijo
-Perdón? Solo nos llevamos 8 años- dije y reímos
-Solo? - preguntó y asentí riendo- igual si son solo 8 años- dijo acercándose
-Ahora son solo? - pregunté riendo
-Perdón si me desubiqué- dijo alejándose y negué
-No te desubicaste- dije y me acerqué yo
Nuestros labios estaban a escasos centímetros hasta que él junto nuestros labios, el beso duro unos minutos hasta que nos separamos por falta de aire y nos quedamos mirándonos y sonriendo.
-Sos muy lindo y quiero ir despacio, vayamos lento y que lo nuestro se quede nuestro- dije y asintió
-Sos muy linda Anto- dijo y le sonreí
-Un besito más- dije besándolo
Pasamos una tarde con besos y hablando hasta que se hizo la noche y se fu a su casa, quedamos en vernos estos días y se despidió un dulce beso en mis labios.