Capítulo 10

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Catalina (22 de noviembre de 2019)

Estaba sentada en el patio de casa. Con mis amigas, más Valentín y Javier ahí.

Me sentía muy feliz en ese momento, nadie estaba sorprendido de ver a Javi ahí. De mis amigas lo esperaba porque seguro tenían algo que ver, pero de Valen no.

Entré a buscar algo para tomar y Valentín se ofreció a acompañarme.

-Dale boluda, es el momento para que me hagas preguntas. Me miras raro cada vez que cruzo palabra con Javier- él tenía una sonrisa en la cara.

-Entiendo que se vieron varias veces, pero que no hicieras preguntas sobre que esta acá me sorprende- le pasé unas botellas para llevarlas afuera.

-Tus amigas son Luz, Fia y Yam. Eso responde todo, son más chusmas que mi vieja. Ya se me hacía raro ver que las tres likeaban a Bnet- era de esperarse.

-Sí, pero eso no es suficiente- suspiró.

-Pensé cuál era la más fácil de convencer. Sabes que a Yam le decís hola y ya está. Así que pregunté y me largo todo como si lo estuviera vomitando- los dos nos empezamos a reír.

-¿Qué te dijo exactamente?- cuestione.

-Que son amigos, y que se conocieron hace tiempo. Me contó que él venía a Buenos Aires y fui yo a buscarlo porque ellas no podían- eso no me lo esperaba-cerra la boca que te va a entrar una mosca... Igual eso de amigos no se lo cree nadie- arrugue la nariz.

- De verdad somos solamente amigos- se reía como si fuera un chiste, yo me puse seria.

-Vamos, a vos te conozco, te gusta. Y a él no lo conozco pero eso de venir así. Con boludeces a otro lado, si ustedes se ven como amigos son unos tontos. A no ser que sean ganas nada más, como ya son grandecitos pueden ver si es eso- no dije nada. Seguí caminando en silencio pero él fue rápido y se paró frente a mi.

-¿Qué? -dije nerviosa.

-Ya pasó, que mala sos ocultando cosas- no sabía a dónde mirar- no tenes que decir nada. Me cae bien y se nota que te quiere. Es tu vida igual, ya estás grande- no dijo nada más y salió antes que yo. Cuando salí me quedé parada junto a la puerta.

Mis amigas y Javier se reían como si nada. Parecían muy entretenidos, intenté grabar esa escena en mi mente.

De repente él giró y me vio, sin dejar de sonreir guiño el ojo.

Estaba al borde de la muerte.

Me acerqué con cuidado y me senté junto a él.

Así pasamos gran parte de la tarde, y la noche. Mis amigas se fueron casi a las once, al igual que Valentín. Se ofrecieron a llevar a Javier pero les dije que yo me encargaba.

Se despidieron porque no las iba a ver hasta que fueran a Madrid.

-Tus amigas son agradables- sonreí cuando lo escuché.

-Sí, también son un poco insoportables ¿Alquilaste habitación de hotel?- negó, él viajó solo con una mochila.

-No, Yam me dijo que alquilara después que seguro conseguía algo-negué con diversión.

-Tengo lugar de sobra, te podes quedar. Yo me voy mañana a España, no sé si sabías eso-asintió.

-Sí, de hecho nos vamos juntos, le pedí a Yam que sacara el pasaje- son putas pero inteligentes. Con razón ella se ofreció a sacar los pasajes.

-Viniste para estar menos de un día- movió los hombros como si no fuera importante.

-Pero vine, tenía que estar. Aunque no salió como esperaba porque tuve que ir a ver a los de Red Bull-tenía todo planeado, era un amorcito.

Recompensa y castigo; BnetDonde viven las historias. Descúbrelo ahora