¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
☼
JJ abrió sus ojos y lo primero que vio fue el cabello rubio de la chica a su lado. Violeta dormía plácidamente entre sus brazos dándole la espalda. El rubio sonrió mientras enterraba su rostro en el espacio entre el cuello y el hombre de la de ojos verdes. Violeta se removió mientras soltaba un pequeño jadeo.
–Buenos días. —JJ habló en su oído.
–Buenos días. —Dijo ella mientras se daba vuelta para mirarlo a los ojos.
Violeta sonrió cuando JJ hizo una mueca divertida mientras ponía las manos en su cintura para pegar lo más posible sus cuerpos. Ella suspiró entrecortado antes de juntar sus labios, el rubio le correspondió enérgicamente, convirtiendo el dulce beso en uno más salvaje. Los dedos del chico se dirigieron a la parte superior del bikini de la chica, bajando lentamente el delgado tirante por su hombro. Violeta se removió para que el rubio pudiera sacar completamente la parte de arriba del bikini. Rápidamente, la rubia se encontraba a horcajadas sobre el chico, quien besaba el cuello de la chica. JJ comenzó a bajar aún más sus besos y Violeta no pudo evitar gemir.
–Mierda. —JJ gruñó cuando la rubia comenzó a mover suavemente sus caderas.
Las manos del rubio bajaron hasta un costado de las caderas de ella para hacer presión. Violeta acercó su rostro al del chico para volver a besar sus labios mientras JJ comenzaba a deshacerse de la última prenda de ella. Las manos de Vio bajaron por el abdomen del rubio hasta llegar al borde de sus pantalones cortos. JJ levantó las caderas para que ella terminara de sacar la única cosa que los separaba. Cuando estuvieron completamente desnudos, Violeta se acomodó para unir sus cuerpos. No pudieron evitar gemir cuando la chica comenzó a moverse, primero lento y a medida que pasaba el tiempo, más rápido. El rubio llevo sus manos a la cintura de ella para ayudarla a marcar un ritmo más placentero, Violeta dejó caer su cabeza hacia atrás y JJ aprovechó para dejar besos en su cuello. La rubia llevó sus manos hasta el cuero cabello del chico y tiro sin medir su fuerza de los mechones rubios, haciendo que el chico gruñera en su cuello.
–Violeta... —JJ gruñó cuando la rubia lo empujó para dejarlo acostado sobre el colchón y apoyar sus manos sobre su pecho.
–Mierda, JJ. —Violeta gimió y enterró sus uñas en el pecho del chico cuando este bajo una de sus manos donde sus cuerpos se unían y comenzaba a masajear el punto nervioso de la chica.
Unos segundos más tarde, Violeta sintió cómo todo su cuerpo se tensaba mientras el orgasmo comenzaba a expandirse desde la parte baja de su estómago hacia todo su cuerpo. JJ la miró y pudo jurar que jamás había visto a una chica tan preciosa como ella. Ambos gimieron el nombre del otro cuando al fin alcanzaron el punto culmine de placer. Violeta respiro entrecortado mientras se dejaba caer sobre el pecho del rubio. Pero antes de que pudiera relajarse completamente, la maldición del chico la hizo fruncir el ceño y mirarlo.
