La guardería de Jimin ||YM||

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Yoongi besó por -según él- última vez aquellos regordetes labios sabor cereza y sonrió, dejando una caricia en la espalda de su chico

-Jimin-ah -Suspiró, dejando otro corto besito -Bebé, tengo que irme

Jimin negó, tomando nuevamente los labios ajenos con los suyos y llevando ambas manos del mayor más abajo, dejándolas reposar sobre sus glúteos

Yoongi intentó resistirse, pero siendo sinceros, Jimin era, es y siempre será su debilidad

Sonrieron entre el beso. Yoongi apretó la piel en sus manos y alzó el cuerpo del menor, dejando que Jimin enrede sus piernas en su cintura, amando la sensación de ambos cuerpos juntos

Los cabellos castaños fueron atrapados entre los pequeños dedos de Jimin, el menor los tiró hacia atrás cuando Yoongi movió sus caderas, simulando una rápida embestida que también sacó un suave gemido en el mayor

La estaban pasando bien y ninguno estaba conciente de lo que sucedía a su alrededor, al menos no hasta que los murmullos comenzaron a escucharse desde afuera y entonces ambos recordaron donde se encontraban

Ambos se separaron rápidamente, acomodaron su ropa y se miraron agitados. Jimin sonrió tímido, se acercó al mayor, acomodó sus cabellos castaños y me sonrió apenado

-Lo siento -Se disculpó, alejando sus manos del cabello del mayor y besando rápido ambas mejillas pálidas -Me dejé llevar un poco

Yoongi negó, sonriendole de vuelta y besando luego los labios contrarios. Amaba besar a Jimin

-Ahora me iré, pasaré por ti para volver a casa, ¿bien?

-Bien

Ambos se sonrieron y besándose por última vez, se dirigieron a la puerta blanca y Jimin la abrió

Al paracer se habían olvidado de las madres y niños que estaban afuera, esperando a que Jimin abriera para comenzar con las clases

Bien, quizás eso no era tan malo, a ellos no les importaba lo que los demás piensen, pero al notar la mirada molesta de Suran y los ojitos tristes de Jennie, Jimin y Yoongi se sintieron los peores seres humanos del mundo