PRÓLOGO

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Creo que reencontrarme con mis amigos y amigas después de todo el verano, era lo mejor de empezar el curso. Todos habían llegado y yo cómo siempre llegué algo más tarde, estaban todos en frente la puerta haciendo un corro, y cuándo llegué la primera en abrazarme fue Charlotte, que se soltó rápido de Connor, su novio, y vino corriendo hacia mi, Charlotte, o Char que es cómo le solía decir, siempre había sido mi mejor amiga, y no la había visto en todo el verano. Después Dylan, mi mejor amigo, vino corriendo, era mi mejor amigo, y siempre íbamos él, Char y yo. En acabar el mini abrazo grupal, fuí dónde los otros y les di dos besos a cada uno, hasta que me di cuenta de que había un rostro desconocido, era un chico alto, con un tono de piel morena, el pelo rizado y unos ojos verdes escondidos tras unas horrorosas gafas de empollón, que después de saludarle, me di cuenta que conjuntaban con su horrible vestuario.

-Hola, soy Everlyn.-Dije con el tono más simpático posible

-Hola, yo soy Harry el pri...

-Mi primo-dijo Dylan interrumpiéndolo.

Miré a Dylan y luego mire a Harry, que diferencia entre ambos.

Dylan era rubio y con los ojos azules, vestía muy bien y era uno de los chicos más deseados del instituto, estaba en el equipo de rugby del instituto, en cambio Harry a primera vista, era el típico empollón insocial, el cuál la única conversación que podías mantener era sobre física cuántica. Pero si te fijabas parte por parte, tenía cosas buenas, como sus ojos, su sonrisa o sus brazos.

El timbre sonó y me dirigí a mi nueva clase, me senté en la primera mesa que encontré libre y esperé a que llegasen todos mis nuevos compañeros, por suerte a Dylan le había tocado la misma clase que a mi y nos sentamos juntos, pero no por mucho tiempo, porque en cuanto entró Anne, nuestra tutora nos separó y sento a Dylan a primera fila juntamente con Mandy, la chica mas infantil que jamás he conocido y Dylan me miró haciendo cara de asco mientras yo me reía.

De repente golpearon la puerta y al abrirla estaba Harry. Miré por toda el aula deseando que el pupitre de mi lado no fuera el único vacío y rezando para no tener al empollón al lado.

-Hola, debes ser Harry, el nuevo alumno, verdad?-Dijo Anne haciendose la simpática.

-Si soy yo.-Dijo Harry sonrojado debido a las burlas de uno de los compañeros.

-Muy bien Harry, pues puedes sentarte al fondo, junto a Evelyn, seguro que te ayudará a incorporarte.

Quería mucho a Dylan pero sentarme al lado de su primo no me hacia especial ilusión. Opté por pasar de Harry y hablar con mis compañeras de delante sobre las vacaciones.

-Perdón si interrumpo-Dijo Harry tartamudeando.

-Que pasa?.-Respondí

-Me podrías decir dónde esta el aula de química? A segunda hora nos toca y no me gustaría llegar tarde.-Dijo nerviosamente.

-Si claro, yo tengo que ir también, sigueme en cuanto acabe esta hora.

En los siguientes días nuestras conversaciones eran de este tipo, lo que ya había imaginado desde un principio. Pero todo cambió el día que decidí quedar con él para que me ayudara con química.

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