☪ ★ ⸻ ❛ Es una promesa. No lo olvides jamás ❜
Adara Beckham toda la vida creyó que era mejor vivir sin rencor u odio en el corazón, a pesar de que nunca fue reclamada por su padre que es un dios olímpico y que sobre todo su inocencia e ingenuidad...
En la Colina Mestiza, ambos se separaron del grupo que se encontraba despidiéndose del muchacho para poder hablar en privado. Adara aún estaba muy avergonzada de lo que había sucedido el día de ayer por la tarde, sin embargo, haber logrado decir sobre sus sentimientos la alivió de cierta forma. Por otro lado, Luke parecía mucho más felíz que antes, sonriendo y abrazándola lo más que podía.
—M–Me quedo sin aire —bromeó Ara, pasando sus manos por detrás de la espalda de Luke. Él se separó un poco del abrazo, aunque no la soltó por ningún motivo—. ¿Llevas todo lo necesario?
Luke puso los ojos en blanco, riéndose por lo bajo.
—Claro que sí. Estuviste toda la noche haciendo una lista —le dice divertido—. Tranquila, volveré en cuanto termine la misión. Luego tendremos todo el tiempo para nosotros para las vacaciones de invierno.
—Se acerca Navidad —murmuró Adara, mirando alrededor—. El campamento en época navideña me gusta mucho más. ¡Deberíamos hacer muñecos! Pero sin guerras, el año pasado noqueaste a Corvus con una bola de nieve —soltó lo último con fingida indignación.
