Gardenia [capítulo cinco]

1.6K 316 56
                                    

GARDENIA ROJA

La gardenia es una planta arbustiva con hojas generalmente de color verde intenso y brillante que adora vivir al aire libre. La gardenia roja simboliza el amor secreto entre dos personas. Es símbolo de pasión y de amor, pero este vinculado al secretismo. También demuestran los siguientes sentimientos: admiración y respeto.

Wei Wuxian se aferró a la suave sabana con ambos brazos, apretándola contra su pecho. Sus párpados se sentían pesados y seguían cayendo cada que intentaba abrirlos. Por la escasa luz que se colaba en la habitación podía deducir que aún no amanecía. Restregando su mejilla contra la almohada, se dispuso a dormir un poco más.

Esa noche sus sueños no habían sido las usuales pesadillas que olvidaba con cada despertar. El brillo de una espada había alumbrado los senderos estériles de sus sueños y una fragancia que no conocía lo suficientemente se había impregnado a él, tranquilizando su agitado corazón hasta sosegarlo.

En medio de la transición del sueño a la vigilia, Wei Wuxian apartó una de sus manos de la cobija que abrazaba. Tanteando el lado vacío de la cama, sus dedos toparon con una tela suave. Acariciando el borde, jaló un poco más de ella, atrayéndola hacia él. Indeciso, la acercó a su rostro. La sensación de la tela rozando su cara era aún más reconfortante que las rasposa cobija y la fragancia era similar a la que se había adherido a su sueño.

Wei Wuxian inhaló la fragancia sin dignarse a abrir sus párpados. Había sido una noche reconfortante y sólo quería alargarla un poco más antes de volver a la realidad. Convencido y sin necesidad de forzarse a dormir, pronto cayó en un sueño profundo donde la misma espada de brillo azul continuó guiando sus pasos.

[●]

Al medio día, cuando el calor sofocó las habitaciones, Wei Wuxian despertó. Aguardó unos minutos, orientando su mente. Los sucesos del día anterior fueron cruzando por su cabeza en orden. Recordó a Lan Wangji y recordó la partida de Wen Ning. Confiaba en Wen Ning, pero la idea de dejarlo solo provocaba un nudo en su pecho que no lo dejaba tranquilo, pero ambos debían cumplir con las tareas encomendadas o corrían el riesgo de perder su oportunidad de reencarnar.

Al bajar de la cama y buscar sus prendas de vestir, Wei Wuxian se percató del baño con suficiente agua para bañarse. Al lado, en una mesa pequeña, se encontraba una bandeja de fruta finamente cortada.

Eran pequeños detalles ordinarios, pero no para Wei Wuxian, a quien se le había prohibido comunicarse con las personas vivas. El conseguir una habitación o un baño era imposible para él, así que cuando no descansaba en posadas con poca ocupación, Wen Ning y él dormían en algún rincón cómodo y se bañaban en cualquier lugar con agua limpia.

Desprendiéndose de las últimas prendas, Wei Wuxian introdujo sus pies en el baño. El agua era fría, perfecta para contrarrestar el calor. Sin poner resistencia, pronto se sumergió hasta que su cabello negro y suelto flotó sobre el agua, enredándose en sus brazos.

Al tener la bandeja de comida cerca, fue picando la fruta. ¿Qué pasaba con Lan Wangji? En su vida pasada no lo aprobaba y en esta, después de herirlo, había decidido seguirlo sin razón aparente. Pero el descaro de Wei Wuxian era tanto, que si con cada despertar un baño y comida esperaban por él, podría incluso aceptar permanecer un poco más en la tierra como mensajero de la muerte.

Limpio y alimentado, Wei Wuxian salió por la ventana de la posada. Años y años de utilizar el mismo método habían provocado que olvidara cómo usar una puerta. Como predijo, Lan Wangji ya no se encontraba en la posada y en su lugar recorría los distintos puestos ambulantes.

Siguiéndolo de cerca, Wei Wuxian se distrajo con unos farolillos de papel. El papel exterior era blanco, pero habían dibujado un par de conejos en el centro. Uno era negro y el otro blanco, pero juntos formaban el equilibrio de la vida.

Karma [Wangxian]Where stories live. Discover now