TENTATION ─ jinsu

𝘁𝗿𝗼𝗶𝘀 | una plática y un plan

ㅤ
Una vez, hace miles de años, había una reina del Tercer Gran Clan llamada BoYoung. Ella era tan extraordinariamente bella, inteligente y amable que tenía pretendientes de toda la galaxia. Sin embargo, la reina BoYoung siguió rechazando a todos sus pretendientes, declarando que quería dedicar su vida a gobernar su Clan.

No todos sus pretendientes aceptaron su rechazo fácilmente. Uno de ellos, HyungSik del Primer Gran Clan, estaba tan fuera de sí por el enamoramiento y la rabia que secuestró a la reina BoYoung y la forzó a ella a un lazo matrimonial arcaico, del tipo que era imposible de disolver.

Las consecuencias fueron inimaginables. A pesar de los innumerables intentos de romper el vínculo, el asaltante permaneció vinculado a la Reina. Al final, no dispuesta a comprometer a su Clan, la reina BoYoung abdicó a favor de su hermano.

Pero la historia no terminó allí. Cuando la Primera Casa Real se negó a ser responsable por las acciones dañinas de HyungSik contra la Tercera Casa Real, el escándalo político se convirtió en un conflicto militar que, finalmente, involucró a todos los Grandes Clanes en la guerra más grande del planeta en la historia de Koguryo, una guerra mundial. Eso casi acabó con toda la población.

Tomó décadas recuperarse de esa guerra y sus consecuencias. Para evitar que algo así vuelva a suceder, el Consejo de los Grandes Clanes propuso una solución: unir todos los núcleos telepáticos de los niños desde una edad temprana. Tal vínculo infantil funcionó de manera diferente a cualquier otro vínculo telepático, profundizando en la psique del niño y haciendo imposible que alguien fuerce un vínculo matrimonial. En cualquier otro momento, tal propuesta, sin duda, habría llevado a un debate sobre temas de aceptación, ya que los niños, al ser muy jóvenes, no podían dar su consentimiento; sin embargo, después de años de derramamiento de sangre y décadas de reconstrucción, nadie quería que algo así volviera a suceder y la solución alivió a la mayoría.

Pero de vez en cuando había personas que se rebelaron contra el vínculo, todo lo que representaba y todo lo que había robado.

ㅤ

•  •  •

ㅤ

YoonGi caminó por el corredor familiar que conducía a los aposentos de Vante, emocionado e impaciente por ver a su mejor amigo por primera vez en cinco meses. Había estado fuera del planeta cuando recibió la noticia del regreso de Vante de Sol III. YoonGi no había podido regresar a Koguryo antes, por mucho que se preocupara por su amigo.

Y él estaba preocupado.

Vante había parecido apagado cuando YoonGi lo llamó. Le había dicho que hablarían cuando YoonGi volviera a casa, como si Vante temiera que alguien escuchara lo que tenía que decir. Eso ciertamente había despertado la curiosidad de YoonGi.

—Su Alteza lo está esperando, príncipe YoonGi —dijo la IA del palacio con su voz neutral.

—¿Está SeokJin en casa, Borg'gorn? —preguntó YoonGi antes de que pudiera detenerse. No había visto a SeokJin en veinticuatro días y estaba perfectamente feliz por eso. Él solo... solo necesitaba saber si SeokJin estaba en el edificio. Se sentía descentrado si no lo sabía con seguridad.

—No, el Príncipe Heredero está en el Ministerio, Su Alteza.

YoonGi frunció los labios, preguntándose si era verdad o si SeokJin le había dicho a Borg'gorn que le dijera eso. No es que importara. Tampoco era como si él quisiera ver al imbécil.

La puerta de los aposentos de Vante se abrió y YoonGi entró.

La habitación familiar inmediatamente lo tranquilizó. Siempre le habían gustado las habitaciones de Vante por sus paredes transparentes de piso a techo con vistas espectaculares de la Bahía de Pheriana. El Segundo Palacio Real estaba ubicado en uno de los lugares más hermosos de Koguryo, rodeado por la Bahía de Pheriana y el Parque Nacional Baldur. A veces, YoonGi casi deseaba vivir aquí (el palacio donde vivía estaba rodeado de pantanos brumosos y montañas grises y no era tan bonito), pero luego recordaba lo que implicaría vivir aquí. Ninguna vista bonita compensaría la presencia de SeokJin bajo el mismo techo.