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Era una mañana tranquila, todos veían pasar al hijo del director saludando a aquellos que se le acercaban. Era una persona amable, respetuosa y muy tierna. Se podría decir que todos lo querían, era alguien admirable. Cada persona que preguntara por él sabría decirle que es lo contrario a su padre y que fuera del colegio, por más que siguiera siendo amable, era un poco diferente a lo que mostraba ser en el colegio. Aun así todos le querían.

Kim Taehyung. No había persona que no supiera de su nombre, no es como si fuera amigos de todos pero él perfectamente se podría llevar con cualquier tipo de persona, de alguna u otra forma te terminaba atrapando. Siempre ayudaba a las personas que lo necesitaban en clases, él no era egocéntrico, era una persona muy transparente.

Ante la belleza que tenía aquel joven, era claro que tendría admiradoras y uno que otro admirador, pero esos no lo podrían decir en alto ya que serían injustamente juzgados. Siempre tenía una que otra carta declarándose, pero él amablemente buscaba a la persona para rechazarle y pedirle perdón por eso, no se sentía preparado para estar en una relación, decía. Pero siempre les terminaba preguntando si podían ser amigos.

La semana ya estaba terminando y como siempre, un par de chicos se acercaron a él para preguntarle si quería ir a una fiesta. Todos los alumnos sabían que Taehyung amaba las fiestas, se volvía loco, era como un alma de la fiesta.

— Hey, Taehyung. — Habló Sungjae, uno de los amigos del nombrado. Se habían conocido hace años, Sungjae se había sorprendido con la actitud diferente que tenía dentro y fuera del establecimiento. Le encantó como era, ambos pegaban muy bien, ahora eran amigos inseparables y hasta algunos sentían celos por la estrecha amistad que tenían. — Hoy habrá una fiesta en mi casa, estás invitado.

Recibiendo una sonrisa de su parte le asintió. — Ahí estaré, nos vemos. — Respondió guardando sus cosas, había sido la penúltima clase del día viernes. Taehyung se sentía cansado, había sido una semana más o menos dura.

Taehyung era alguien ordenado, siempre con su uniforme, no como otros que llegaban con camisetas de diferentes colores saltándose las reglas. No se veía como un "nerd" pero seguramente sí no fuera el hijo del director y no lo conocieran, sería víctima de burlas. Además era entendible que se vistiera así cuando su padre es el director. Cuando salía y lo veían con su ropa casual, muchos quedaban sin aliento ya que los trapos que se podía era suficiente como para enamorar a cualquiera, todo le quedaba bien pero a él le encantaba más el estilo dark, aunque también ocupaba cosas de color beige.

Cuando salió de su salón vio pasar a un chico bastante atractivo que hizo que muchos voltearan a verle. Jeon Jungkook. También era alguien popular, pero por ser extremadamente irritante pero también caliente. Ambos no se hablaban pero se conocían, a veces taehyung pensaba que él le odiaba porque cada vez que sus miradas se encontraban, su mirar se fruncía y no entendía por qué.

Podía escuchar los suspiros de algunas chicas y chillidos casi gritándole en la cara que era guapo. Muy pocas veces también pensaba eso, tenía ojos y podía ver lo atractivo que era su contrario, pero borraba todo aquel pensamiento cuando pasaba a mayores. Le asustaba. más su padre.

Ignorando sus pensamientos, salió para ir a sacar algunas cosas de su casillero y así cuando termine su última clase, pueda irse a descansar un poco.

— ¡KIM TAE HYUNG! — Escuchó gritar a lo lejos, reconociendo en instante aquella chillona voz.

— ¡PARK JIMIN! — Gritó de vuelta, abrazándole cuando estaba cerca. — Tenemos clases juntos ahora, ¿nos sentamos juntos?

— Claro que sí, por eso venía justamente. — Le sonrió en grande, viendo cómo guardaba cosas en su mochila. — ¿Iras a lo de Sungjae?

— Sí, llegaré tarde porque ya sabes el problemita que tengo en casa, pero allí estaré.

— Me gustaría ver el día en el que te enfrentes a tu padre, sería genial.

— Quizás cuando tenga una casa para cuando me saque a patadas de la suya.

— Mi propuesta sigue en pie.

— Lo sé.

— No te quieres ir a vivir conmigo acaso, ¿tan mal amigo soy?

— Claro que no, pollito. Sabes que eres mi alma gemela, sólo déjame pensar que haré con mi vida después, tengo dinero ahorrado y todo eso, pero ahg. Déjame arreglar mi vida y te digo.

Jimin sólo supo asentir, era uno de los pocos que sabía lo que Taehyung tenía que vivir en su casa y es por eso que le sugirió que se fueran a vivir juntos cuando acabaran el colegio. Ambos estaban a ultimo año, además de que éste se estaba acabando. Era Julio recién, casi pasando a Agosto. Pero Taehyung tenía muchos problemas internos así que todavía lo estaba pensando.

Ambos se fueron parloteando para ir a comer algo antes de ir a su última clase, hablando lo que harían en la noche. Park casi chillando que quería conocer a alguien allí porque se había aburrido de sentirse solo, Tae río en su cara ya que siempre decía lo mismo y al final no duraban ni una semana.

¡No están permitido los homosexuales! ₍ kooktae ₎Where stories live. Discover now