Segunda parte del libro The Husky ans His White Cat Shizun.
La pena y la agonía se apoderan de Mo Ran, la verdad que ha sido revelada hacia sus ojos lo deja sin palabras para continuar, debe de ser una broma, una mentira que dura 10 años ha de ser u...
El solo había visto el Gujin ''Jiu Ge'' de Chu WanNing una vez en toda su vida. Cuando él la invoco en su batalla de vida o muerte. Sus acordes dividieron los cielos y atravesaron las nubes.
Todas las criaturas que había estado bajo el control del ajedrez ZhenLong en ese momento, desde las personas hasta las bestitas y los espíritus, recobraron la consciencia gracias a la influencia de los acordes de Jiu Ge. El fuerte ejercito de un millón de piezas de ajedrez de Mo Ran fue lanzado en un completo desastre solamente por una canción.
Pero invocar el arma sagrada requiere el uso de un núcleo espiritual además de consumir una gran cantidad de energía espiritual.
Chu WanNing ni siquiera podía volver a llamar a TianWen, entonces ¿Cómo pudo manejarse para convocar a JiuGe que era un arma mucho más poderosa que TianWen?
La batalla sobre el Lago Celestial no fue menos feroz que el combate a muerte entre maestro y discípulo de aquel tiempo.
Pero la memoria de Mo Ran era borrosa, porque, después de aquel sangriento combate finalmente no hubo nadie a su lado con el que pudiera hablar.
La verdad es que aun en su vida pasada, incluso hasta el día de su muerte no logro entender como es que Chu WanNing había conseguido usar su alma para así llamar a JiuGe.
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Era un tipo de conexión que ni siquiera podía existir entre un arma sagrada y su maestro, pero de algún modo Chu WanNing lo había logrado.
Ese día, bajo el sonido del guqin, las piezas de ajedrez ZhenLong de Mo Ran se hicieron añicos una tras otra, la melodía de JiuGe era mucho más pura e indomable que la primera vez que la había visto, años atrás. Era tanta su fuerza que incluso sospecho que el núcleo espiritual de Chu WanNing no estaba roto después de todo. Que simplemente había estado fingiendo todos estos años, soportando todas las humillaciones en la espera de una oportunidad para poder vengarse de un solo golpe.
Más tarde, no pudo evitar preguntarse si tan solo ese hubiera sido realmente el caso. Si Chu WanNing solamente hubiera estado pretendiendo, entonces tal vez las cosas no habrían ido tan lejos.
Si tan solo....
JiuGe nulifico el arte prohibido de Mo Ran. Retornando la consciencia a los cultivadores que en ese momento se estaban matando entre ellos. Incluso destruyo los pilares de hielo que mantenían atados a Xue Meng y Mei Hanxue.
Mo Ran salto hacia los cielos, sus túnicas se azotaban contra el viento, ojos cargados de ira y deleite. Apenas podía esperar para saber cuántas habilidades escondidas tenia Chu WanNing bajo la manga.
Aterrizo en la parte superior de la barrera. Se acercó, para pararse frente a Chu WanNing.
Aquel pálido par de finas manos se detuvieron, colocándolas sobre las cuerdas de Guqin, interrumpiendo el sonido.
