Labios

xviii

Querida mamá; se me ha acabado el maquillaje, y no puedo dejar que veas mis ojeras.

Querido papá; se me ha estropeado el tocadiscos, ¿merece la pena vivir sin poder escuchar a Rod Stewart cada vez que me deprimo?

Querida mejor amiga; hiciste muy mal tu trabajo. Igualmente nunca me he merecido una mejor amiga de verdad.

Querido mejor amigo; ojalá hubieras existido, pero ningún chico se me acercaba.

Querido Max; excepto tú. Gracias por no intentar levantarme, y perdón por hundirte a mi lado.

Querida hermana; nunca te he querido, así que empezaré de nuevo:

Hermana; te odio. Porque veo en tí lo que papá y mamá buscaban en mí. Sí, es envidia.

Querida yo de hace 5 años; perdón por no haber tomado antes la decisión de marcharme.

Querido Sr.Stevens; como psicólogo eres un verdadero cabrón, pero eres un buen amigo.

Querida abuela; a tí sí que te voy a echar de menos. Te quiero.

Querido quien-quiera-que-seas-y-estés-leyendo-mi-carta-de-suicidio; creo que me estoy demorando demasiado. Adiós.

Pd: Querido David; te dejo para el final, porque me da la gana. Te he hecho caso: he dejado de fingir. Ya no me pinto los labios.

Nota al margen: Querida persona que entierra a los muertos; he mentido a David. Me estoy pintando los labios, pero sólo un poco. Déjalos así, a mitad, ¿quieres?