La Cámara Secreta | DRAMIONE

CAPITULO 15: ABRAZOS Y LIBERTAD

Era de mañana cuando los niños llegaron al despacho del director encontrándose con Dumbledore, McGonagall y la familia Weasley, fue la misma Molly quien abrazo a los niños, en sus mejillas había rastros de lágrimas

Por lo que después de darla a los señores Weasley un breve resumen de lo que había sucedido y de que Ginny rogará por estar en la ceremonia de cierra, Arthur y Molly se fueron asegurando que los verían en el la estación de tren mañana

- Profesora McGonagall, acompañe a la señorita Weasley a su habitación - La susodicha asintió y Ginny la siguió no sin antes agradecer por dejarla permanecer en Hogwarts

- Supongo que se darán cuenta de que en las pasadas horas, han quebrantado una docena de reglas y de que hay suficiente evidencia para que sean expulsados -

- Sí señor - Decía el trío de niños con sus cabezas bajas

- Sin embargo, es imperioso, que reciban el premio especial por servicios al colegio -

- Gracias, señor - Habló Ron, Dumbledore asintió con una sonrisa mientras se levantaba

- Señor Weasley, por favor envié está carta a Azkaban, me parece que queremos a nuestro gran amigo Hagrid de regresó - Ron asintió tomando la carta y desapareciendo

- Primero, Harry, quiero agradecerte por tu sincera lealtad en la cámara, por esa misma razón es que Fawkes salió en tu auxilio - El niño asintió - ¿Te preocupa algo? -

- Había muchas similitudes entre... Tom Riddle y yo -

- La noche en que te hizo la cicatriz, por error cabe admitir, Tom paso varias de sus habilidades a ti, como la lengua parsel -

- ¿Eso no me deja en Slytherin? - Pregunto el niño, Draco miro al director

- Creo que tu mejor que nadie sabe, que independientemente de la casa, lo que importa son nuestras creencias, de otra forma, creo que el joven Malfoy es un mejor Gryffindor que Slytherin y la señorita Granger una mejor Ravenclaw -

- No entiendo - Hablo el niño mirando al director

- El sombrero nunca ha cometido un error, estás en Gryffindor porque mereces estar ahí, todos tenemos las características de las cuatro casas, pero siempre habrá una que resalte más, además, solo un verdadero Gryffindor puede usar esa espada - Dumbledore le sonrió y se giró a ver a al rubio - Joven Malfoy, gracias nuevamente por demostrar que no existe la rivalidad entre casas, enviaremos una carta a su madre para decirle cuan orgullosos estamos de usted -

Antes de que el Slytherin pudiera contestar la puerta del despacho se abrió de golpe dejando entrar a un muy enojado Lucius Malfoy y a Dobby, Draco miro a su padre con miedo y Harry a su rubio amigo

- Así que ha vuelto - Dijo mirando al director con desprecio y se giro hacia su hijo - ¿Qué haces aquí? Mira nada más tu cara y tu ropa -

- Dobby, ¿Le sirves a él? - Pregunto Harry, Draco le vio sin entender y Lucius se giro hacia el elfo

- Luego ajusto cuentas contigo -

- Antes que nada, joven Malfoy puede retirarse, ahora que su padre está aquí no será necesario mandar una carta avisando que el profesor Lockhart lo llevó a la cámara como señuelo - Draco asintió siguiendo la mentira del director, saliendo de la oficina, mientras Lucius pasaba la mirada de su hijo al hombre, si Narcissa se enterara de eso, definitivamente se enojaría con él

- Entonces, supongo que el culpable apareció, ¿cierto? - 

-Oh sí - Asintió el director 

- ¿Quién es? - Albus miro a Harry y después al rubio hombre