Si de alguna manera pudiera regresar atrás, Furihata disfrutaría cada instante, cada momento junto a Akashi, le diría sin miedo que lo amaba, lo gritaría al mundo entero, abrazaría a Akashi y le daría todos los besos que siempre quiso darle, se entr...
Pero piensa que todo vale la pena cuando finalmente tiene su título en su mano derecha y las maletas en su lado izquierdo.
—Entonces, supongo que esta es la despedida. — Akashi dice y Furihata asiente.
Desearía poder decirle que le gusta, no tiene nada que perder de todos modos, desde hoy es oficial que se murada y de lo poco que Akashi le ha hablado sobre sus planes a futuro, sabe que tiene planeado irse algunos años al extranjero para ayudar a la compañía de su padre a la apertura al mercado extranjero.
La probabilidad de que se vuelvan a ver es una en un millón.
Sería bueno marcharse de este apartamento y dejar aquí sus sentimientos por Akashi, innecesarios y estúpidos.
Furihata sonríe, toma su maleta y se despide.
Es un cobarde.
— ¡Te deseo toda la suerte y felicidad del mundo Akashi!
—De igual manera, Furihata. —Furihata abre la boca "te amo", quiere decir, pero se detiene antes de que la primera palabra abandone sus labios, porque Akashi está sonriendo.
Está sonriendo para él, amable y cálido, deslumbrante y precioso.
Es imposible que Furihata diga algo, no cuando Akashi le sonríe de esa manera, es la mejor última imagen que puede llevarse en el corazón.
Furihata se gira antes de comenzar a llorar y camina hasta el ascensor.
Algún día, esos sentimientos desaparecerán, algún día cuando vea a Akashi en la televisión haciendo algo grande, se reiría y presumirá a sus amigos y familia que ese tipo genial en la televisión y él, compartieron un apartamento en la universidad. Será la anécdota favorita para contarle a sus tías y tíos en reuniones familiares, sobre que un día, Furihata pudo llamarse así mismo el amigo de Akashi Seijuro, el actual primer ministro de Japón o el dueño de medio mundo, no importa que, Akashi está destinado a algo grande.
Si, algún día...
Él solo tiene que esperar.
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