Una Nueva Vida

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Cuando llegamos de nuestra luna de miel, nos reincorporamos al trabajo, pero Albert convirtió su oficina privada en un cuarto de descanso por mí ya evidente embarazo, también lo mando a ampliar para hacer un cuarto para el niño; además mando a hacer una guardería para los niños de los empleados.

Nuestras noches de pasión son cada vez más intensas no sé si son por las hormonas del embarazo o porque me he casado con el amor de mi vida, lo amo a un más de lo que ame alguna vez a Tony, claro que son distintos tipos de amor, aun que Tony fue mi primer hombre Albert será el último, lo amo tanto, solo de recordar cómo me siento cuando me hace el amor, siento un gran revoloteo en mi estómago, siento como me electrifica todo el cuerpo, mi mente volátil regresa a esa misma mañana que es la última vez que me lo había hecho, recuerdo como me besa, cierro los ojos y siento sus ardientes labios bajar por cada parte de mi piel, mis pechos se ponen erectos y siento como su lengua pasa por cada uno de mis pezones y sus manos me estrujan la piel, me siento húmeda de nuevo, me muerdo el labio inferior y yo sé que tengo ojos de lujuria mientras retomo mis recuerdos, a un que no lo crean mi Bert es pasional, pero delicado a la vez, yo también quiero tocarlo y besarlo cada trozo de su piel y así hago, lo voy besando inicio por la boca y le beso toda la cara, luego bajo a su pecho y sigo hacia el sur de su anatomía, luego le tomo su miembro y solo de tenerlo entre mis manos jadeo, ahhhhh, lo lamo como si de una paleta se tratara, lo veo a la vez a los ojos con una mirada llena de picardía y lujuria, lo introduzco en mi boca y empiezo a meterlo y sacarlo, el gime y a la vez me estruja los pezones, siento como gotas de un líquido sale de su miembro, me separa de él, me acuesta y me devuelta ahhhhhhh, gemimos los dos, el me coloca boca abajo y me besa desde el cuello, mis orejas, toda la espalda y al mismo tiempo me toma de los glúteos y los besa , mordisquea al igual que toda mi espina dorsal, mi cuerpo vibra y me vengó, como es habitual el me da vuelta boca arriaba, para invadirme con su boca y lengua toda mi intimidad, le encanta tomar todo mi jugo y luego me penetra de forma insolente, con cada estocada me eleva al cielo, nuestras almas son una sola, jamás me había sentido así yo sé que él se siente igual, no podemos estar lejos uno del otro y nos cuidamos, apoyamos, pero sobre todo no podemos dejar de tocarnos, así que regreso a mi recuerdo y siento como se estremece mi cuerpo cuando ambos llegamos y alcanzamos al estado nirvana, porque no solo nuestros cuerpos hacen el amor, también lo hacen nuestras almas que ahora son una sola.

Se abre la puerta del cuarto de descanso, lo veo como ingresa y cierra con cerrojo y camina hacia mí con una sonrisa de lado y con cara de depredador tras su presa, lo hicimos de nuevo como siempre lo hacíamos en cada oportunidad.

Dos semanas después, me levante tan sensible, sentí mi vientre bajo, al parecer mi bebe ya está en posición, anoche las chicas me hicieron un Baby Shawer, jugamos y gozamos tanto, pero esta vez sin bebida alcohólica, porque todas hicimos bien nuestro trabajo a la ves salimos embarazada, solo que Claudia se nos adelantó unos meses así que ella y Jorge ya tenían una bella niña de pelo castaño como el padre, ojos azules como la madre y una piel muy blanca; es cansancio me dije, a un no es tiempo, veo a mi esposo salir de la ducha y no puedo evitar írmele encima, solo de ver ese torso desnudo, esos músculos que hacían que se viera tan sexi, ese hermoso six pack que le marca el abdomen, me muerdo el labio inferior, me ve y ya sabe que lo voy a tomar, no me puedo detener es algo que no puedo evitar, lo ocupo adentro, es mi droga, así que lo hago, pero tengo la necesidad que me tome con fuerza, así que lo acuesto y lo monto de una forma salvaje y desenfrenada, así lo hago, amor me dice sobándome la cara para que me calme, recuerda que estas embarazada, si pero no enferma le contesto, mi cuerpo lo pide, te necesito, luego el me dio vuelta y yo enredé mis piernas en sus caderas y con los brazos como apoyo, me movía febrilmente con cada una de sus envestidas de tal manera que las hacía más rudas, así que alcanzamos el climax, a la vez, esta vez sentí que me vine como nunca antes parecía que me había orinado, me fui a bañar y sentí una punzada en la espalda pero no le hice caso, así que fuimos a trabajar y luego reunión tras reunión, yo cada vez sentía más dolor en la espalda y sentía que me jalaban el vientre, pensé que era por los movimientos del bebe, pero a las cuatro de la tarde el malestar era más fuerte, persistente y permanente, así que le dije a Bert que necesitaba ir a consulta, el me lleva al hospital pero cuando íbamos llegando, empezó a salirme u agua acuosa y el dolor se volvió demasiado fuerte, empecé a orar, me llevo a emergencia y cuando llegamos me llevaron en una silla de ruedas, corrió con migo muy nervioso, mientras daba todos mis datos me llevaron a revisión , Dios dijo la doctora, que pase el padre, esta coronando y mi Bert ingreso incrédulo y a un más nervioso al cuarto, bien dice puje, y así hice, pero mi querida pequeña se le ocurrió poner las manos en su cabecita justo ahora, dios dijo de vuelta la doctora, tengo que meter mis manos y acomodar los brazos del bebe, así que aguante , me dijo la doctora, de repente sentí más dolor y escuche como cuando se rompe cuera y era mi propia piel, me había unido mi hija, sentí algo de dolor, pero luego vino un dolor más fuerte y puje, se escuchó un llanto, tuve a una hermosa niña rubia y ojos azul cielo, de piel muy rosadita y una cara de muñequita, a la que le pusimos Pauna Roussemary Andrew, una niña muy sana y muy grande pesaba doce libras y media cincuenta y cuatro centímetros.

Más tarde......................

Continuara.....................................................

Un suceso EsperadoWhere stories live. Discover now