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Kye

Hoy es otro día.

Cuándo llegué a mi casa ayer, al ratito llegó el resto de mi familia y cenamos todos juntos. Brian y su amigo estuvieron en la cena también.

Después él y mi hermana se dieron una despedida cariñosa, bastante cariñosa para mi gusto, y se fueron él y Aimon a sus casas.

Después de eso solo me fui a dormir, bastante decepcionado con la vida.

No puedo dejar de pensar en esa chica, en esos ojos que me miraron apenados por haberme chocado. En esa pancita que le quedaba tan bien a su pequeño cuerpo. Es la chica más hermosa que vi en mi vida, y vi bastantes chicas en mí corta y hermosa vida.

—¿Qué me esta pasando? —pregunto en voz alta, pensando que alguien me va a escuchar y me va a responder.

Pero nada.

—Estoy más loco —vuelvo a decir en voz alta, pero esta ves negando con la cabeza y con una sonrisa en la cara.

Ya es otro día y no puedo levantarme de la cama. Tengo tanta fiaca.

Estaba por cerrar mis ojos para seguir durmiendo, cuando de golpe siento como se abre la puerta de mi habitación y a los pocos segundos, vuelvo a sentir, como alguien se tira encima de mí.

Empujo a la persona que se alla tirado encima mio y esta cae al suelo.

—Auch —dice la voz de mi hermana, Lie.

Levanto la cabeza de la almohada y la miro ahí sentada.

—Jodete, vos te subiste arriba mío —le digo y ella me mira de mala manera—. ¿Qué querías? —le pregunto.

—Aa si, te vine a levantar para que me acompañes al centro comercial —me comenta levantándose del suelo.

—No, ni sueñes. La última ves que te acompañé, me tuviste como 2 horas parado afuera de una sola tienda. Y encima después me llevaste a 9 tiendas más. No pensé que ibas a ser tan compulsiva con las compras, o con el centro comercial en general.

—Por favor, le iba a pedir a María que me acompañe, pero ahora que está con el estupido de Brian, se la pasa hablando todo el día con él, muy acaramelados y llevan menos de un día de relación. Si siguen así se van a sofocar el uno al otro en poco tiempo —cuando termina de hablar la miro un poco mal.

—No seas así, ahora que tu hermana por fin está con la persona que le gusta, siento que no te alegra que esten juntos —le digo y ella me mira con una expresión de culpa.

Camina hasta la cama y se acuesta a mi lado.

—No es que no me alegré su relación, yo más que nadie quería que estuvieran juntos. Pero llevan un día de novios y siento que mi mejor amigo se olvidó de mí, siento que mi hermana se olvidó de mí. Por ejemplo, yo ahora quiero ir al centro comercial, antes podía contar con cualquiera de los dos, pero ahora no. Porqué están los dos muy enamorados el uno del otro, que se olvidaron que tienen una hermana y una amiga —amo a mi hermana, me encanta que le de tantas vueltas al asunto. Me encanta que a pesar de ser la más fuerte de nosotros tres también es la más complicada y débil.

—Hermanita mía, me parece que estas exagerando un poco. Cómo vos bien dijiste, apenas llevan un dia de novios, deja que estén juntos en su día. Y que hablen todo el día no significa que se hayan olvidado de vos. Y ninguno de los dos está disponible para ir con vos, porque vos no les preguntaste, ¿y te digo porqué? —le pregunto y ella asiente —. Porqué no te gustan las conversaciones acarameladas, y sabés que si vas con cualquiera de los dos, las vas a tener que escuchar todo el día. Y tambien, ninguno de los dos aceptaría porque tardas demasiado cuando vas de compras —termino de hablar y revuelvo su cabello. Ella aparta mi mano y sonrie.

Va a ser realWhere stories live. Discover now