BLONDIE | THE UMBRELLA ACADEMY |

8

Al llegar a la academia ya era tarde así que era muy probable que los demás ya se hubieran ido, o los que se habían quedado ya estuvieran dormidos, así que Cinco y Mia entraron con cuidado a la Academia para no despertar a nadie y dar explicación del porque tenían sangre en sus ropas o en su pelaje, fueron al cuarto de Mia para que la chica pudiera curar a Cinco de la fea herida que le quedo en el brazo.

—estoy empezando a pensar que hiciste muchas más cosas en tu salto en el tiempo—dijo Mia sin dejar de mirar la herida de su hermano—las personas no mandan a matarte solo porque si

—cuando salte y quede atrapado en el futuro ¿Sabes que fue lo que encontré?—dijo Cinco—no encontré nada, no había absolutamente nada; por lo que pude ver, era la única persona con vida,  nunca descubrí quien mato a la raza humana, pero encontré algo más, la fecha en que ocurrió. El mundo se acaba en ocho días, y no tengo idea de como evitarlo

Mia se quedo boquiabierta con lo que acababa de decirle Cinco, habría esperado cualquier otra cosa, pero nunca eso, así que decidieron ir por una taza de café para Cinco y leche con chocolate para Mia para que el chico pudiera continuar con esa conversación.

—sobreviví con sobras, comida enlatada, cucarachas, lo que pudiera encontrar—explico Cinco-intente de todo para volver con mi familia, pero el viejo siempre tuvo razón, siempre la tiene

—no puedo imaginar lo que viviste allá, debió ser horrible estar solo por tanto tiempo—comento Mia

—no estuve solo, tuve a Delores, ella fue mi compañera todo el tiempo—Cinco desvió la mirada al hablar sobre ella, Mia supuso que debió de haber sido una sobreviviente del Apocalipsis—encontré a todos muertos, también estabas tú y Pan, al principio no entendía que había ustedes dos ahí o quienes eran. Pero ahora que lo sé, quiero hacer todo para evitarlo

—te ayudaremos en lo que podamos, ya sabes, no tenemos mucho que hacer aquí—al escuchar que ella y Pan estuvieron en el apocalipsis, a Mia se le erizo la piel, porque no era así como quería terminar su corta vida, y al igual que Cinco haría todo por evitar ese suceso

—¿Y cual es tu historia? ¿Cómo terminaste en esta extraordinaria familia?—dijo Cinco de forma irónica

—la verdad es que no tengo idea—Mia alzo los hombros—siempre que le preguntaba a papá sobre como fue que me adopto o algo de mi familia biológica, la única respuesta que obtenía era "solo debes de saber que fuiste producto del mismo suceso que trajo a tus hermanos y hermanas al mundo"

—pero si fuiste igual que nosotros, eso significaría que hay otros 42 niños iguales a ti—dijo Cinco—¿Por qué no adopto más así como la primera generación de la Academia?

—no tengo idea, pero ahora ya dejaste una gran duda en mi—al decir esto, Mia bostezo—será mejor continuar esta conversación mañana ¿Si?

—claro, hasta mañana—Cinco se levantó y salió del cuarto dejando sola a Mia con Pan

—¿No te da curiosidad?—pregunto el hurón a Mia—saber sobre ti y los otros niños extraordinarios

—mañana iremos a la librería publica a ver que registros hay en internet—Mia se acostó—pero por mientras hay que dormir

Pan se recostó junto a Mia y la chica apago las luces, pero ya pasadas unas horas, del cielo salió un rastro de polvo azul, que entraba por una de las ventanas de la Academia hasta llegar al cuarto de Mia, el polvo seguía su movimiento, pero primero pasaba por el cuerpo de Pan para después concentrarse en Mia.

Aunque este suceso no era nada raro, ya que esto ocurría desde que Pan llego a la vida de Mia, el polvo era lo que los mantenía juntos a ambos, ya que, si algo le llegara a pasar al peludo amigo de la rubia, sus poderes podrían volverse aun más peligrosos de lo que ya son.

Esto hubiera sido igual para todos los niños que nacieron de la segunda oleada del extraño suceso, aunque puede que en realidad haya nueve niños con daimonions esparcidos por el mundo, y no sepan de la existencia de sus hermanos.