Capítulo 3

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- No puedo irme ahora... - insistió Billie, pero había sido demasiado tarde. Los brazos de _______ la elevaron y la subieron sobre su hombro derecho. Cargándola sin previo aviso. Billie entreabrió los labios. - ¡no! – gritó asustada. No podía irse. No debía irse. – por favor, ¡_______! – le gritó de nuevo. Pero esta no haría caso a ninguna palabra que Billie le dijera. Sus piernas caminaron rápido hasta las puertas cerradas del banco. Las abrió con la punta de su zapato y salió con ella entre brazos.

La gente alrededor se volteó a mirarlas. Todo había pasado tan rápido. La escena era conmovedora y a la vez confusa. Billie que no dejaba de gritar en medio de la calle, y _______, que no la dejaría bajar de entre sus brazos hasta que recibiera una buena explicación.

- ¡Bájame! – le gritó una vez más.

- Deja de gritar, cualquiera pensaría que te estoy secuestrando. – le dijo y divisó su auto. Justo en la esquina en donde lo había dejado. Caminó rápido. Al llegar, antes de abrir las puertas de este y depositar a Billie dentro... giró la cabeza y observó sin disimulo el culo de ella. – extrañaba esta vista. – sonrió para ella misma, escuchando a Billie refunfuñar detrás.

Quitó los seguros y abrió la puerta copiloto, bajó a Billie de entre sus brazos e hizo que se sentara en el asiento. Cuando pudo verla sentada ahí... sentada en su auto... no pudo contenerse en pensar ciertas cosas nada sanas en ese momento. Coño, pero que hermosa estaba. Se había pintado los labios de un color rosado encendido que le hacía ver jodidamente provocativa. Y la falda. Y ese puto escote. Y esas piernas. Y esa boca. Y esos ojos. Sonrió para sí misma al verla con ella de nuevo. Cierta nostalgia había entrado en su cuerpo, en sus propios sentimientos. El hecho de tenerla con ella, de nuevo, a salvo, después de tantas cosas que había imaginado pudieran pasarle... le hacía sentir tan bien. Le hacía provocar comérsela a besos y restregarle lo preocupada que había estado por ella entre ellas. Comérsela... comérsela a ella entera... porque solo así, podría calmar todo lo que sentía.

Rodeó el auto y entró a su asiento.

- Deberías agradecerme. – le dijo encendiendo el Mustang. Billie giró la cabeza para mirarla. – supe que la policía iba a llegar en menos de cinco minutos y te he salvado.

El auto avanzó. La pista estaba libre. _______ pisó fuerte el acelerador sin miedo a nada. Como casi siempre. Billie abrió la ventanilla, dejó que el viento le desacomodara el cabello. Sería una noche realmente larga.

Pero de pronto, ambas se quedaron calladas. A pesar de que había mucho por explicar, mucho por decir. La música saliente de los amplificadores era lo único que ahí se escuchaba. "Yamaha" de Delta Spirit, a un volumen prudente.

_______ la miró de reojo. Era imposible parar de mirarla con lo bonita que iba. Aunque de ese modo, solo le entraban más celos de los que ya tenía. ¿Habría conocido a alguien en Tentation? Alguien...¿Cómo ella?... Necesitaba hablarle. Decirle y preguntarle muchas cosas, ¿pero cómo hablar sin que ella también lo hiciera?... tenía que romper el hielo entre las dos.

- ¿Cuándo vas a contarme? – le preguntó sin más rodeos. Se atrevió a bajarle el volumen a la música. Lo único que necesitaba y quería, era escucharla a ella.

- Han pasado muchas cosas...

- Eso ya lo sé, créeme.

- Y te he extrañado muchísimo... - Billie giró el rostro. A continuación, _______ pudo sentir como sus tibias manos le acariciaban el brazo derecho. Se tensó. Se tensó tanto. Su piel, a la misma vez, se erizó fugazmente. Vaya terrible sensación.

- Tú no sabes todo lo que han sido para mí estás semanas Billie. No tienes una pequeña idea de lo que ha sido. – le dijo _______, endureciendo los pómulos al termino de sus palabras. No mentía. Su rostro y sus palabras demostraban exactamente como se encontraba, y como es que había pasado estos últimos días sin ella. Billie mordió su labio inferior. Una culpa muy fuerte yacía dentro de sí misma.

Tentation 2 (Billie Eilish y Tu) G!PDonde viven las historias. Descúbrelo ahora