Capítulo 61

2.6K 337 154
                                    

Anteriormente el peliverde y Setsuna habían formado un equipo pues debían hacer unas prácticas heroicas. Durante todo el día hicieron todo tipo de cosas que suele hacer un héroe normalmente y cerraron la jornada capturando a un ladrón en un museo. El ladrón tenía un don que le permitía bajar o subir la temperatura de todo lo que estuviese a cuatro metros de él, Izuku tuvo que arreglárselas para no dañar nada de lo que había en el museo y debido a eso derrotó al ladrón dejándose congelar, pero convertido en una especie de rana capaz de seguir viva aún después de que su corazón se congelara. Aprovechó la sorpresa que eso causó para dejar inconsciente de un un golpe al ladrón.

En la actualidad ya habían pasado otros dos días de prácticas heroicas y el peliverde había decidido pasar esos dos días con Setsuna pues hacían una buena pareja. Al cuarto dia fue otra historia pues para ese día había decidido hacer la práctica junto con Kaminari Reimi. Ambos congeniaban muy bien juntos así que no había ni un solo momento incomodo entre los dos ya que siempre conversaban sobre algo o se reían de alguna broma que hacía el otro.

Ambos se encontraban caminando por las calles de Shibuya, era el mediodía así que tenían un pequeño descanso para luego continuar toda la tarde sin interrupciones. Reimi arrastró a Izuku a ese maid café que solía frecuentar, esos lugares suelen ser bastante caros así que no iba a dejar pasar todas aquellas oportunidades en las que pudiera hacer pasar por caja al peliverde.

Al ingresar Reimi fue atendida por seis chicos gatos como ya era costumbre mientras que Izuku solo por una chica gato, pues mientras más tiempo pases en ese lugar puedes acceder a más privilegios como cliente. Izuku se sentía realmente incomodo en ese lugar pues todo le parecía muy extraño y surrealista.

Izuku: Es la segunda vez que vengo aquí, pero creo que nunca voy a acostumbrarme - dijo observando la cartilla y ocultando un poco su rostro

Reimi: No se porque dices eso - dijo estando rodeado de esos jóvenes apuestos - ¿Ya sabes qué pedir?

Izuku: Creo que voy a pedir unos onigiris

Maid: Ensiguida vuelvo con su orden amo, estará delicioso porque le pondré todo mi amor

Izuku: jeje - río avergonzado - gracias

Reimi: Yo quiero un tazón de ramen

Nathaniel: Enseguida my Queen

Tras terminar con su almuerzo ambos pidieron un postre, que normalmente suelen estar decorados con dibujos tiernos de corazones, ositos, por las mismas maids.

Cuando estuvieron a punto de irse del sitio, Nathaniel se armó de valor para decirle una cosa a Reimi.

Nathaniel: Disculpe ama, pero debo pedirle ayuda con algo, sé que estoy totalmente fuera de mi lugar

Reimi: Adelante, no tienes porque ser tan correcto conmigo

Nathaniel: En realidad si, está en el contrato de trabajo, pero me comporto así con usted porque realmente lo merece

Reimi: ¿cuál es el problema que tienes?

Nathaniel: Verá ama, hay una clienta nueva aquí que está acosando a los demás mayordomos y quiero pedirle ayuda pues es una heroína

Reimi: ¿escuchaste eso, Izuku? Alguien está abusando de mis niños, debemos detenerla - estaba muy enojada y también estaba consolando a Nathaniel

Izuku: Si, debemos ayudarlos, pero no podemos simplemente retener a una persona con un testimonio. Debemos atraparla justo cuando esté con las manos en la masa

Reimi: Pero no podemos usar a los mayordomos como carnada, no permitiré que sigan expuestos a eso

Izuku: ¿qué sugieres entonces?

Izuku El Dios Del Rayo Where stories live. Discover now