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Hola, antes que comiencen a leer, quería aclarar que en este capítulo hay un aviso (🔴), en la escena se hace mención a hechos que ocurrieron en capitulos anteriores y también se habla de situaciones que pueden resultar incómodas de leer.

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No han llegado al desayuno y las horas en la biblioteca no están pasando lo suficientemente rápido, Agoney está enfadado y en cada libro que toca parece descargar un poco su enojo.

– ¿Qué te han hecho los pobres libros?

Suspira, porque no tiene ganas de hablar, pero sabe que Ricky no se irá sin una conversación porque le está evitando desde hace varios días.

– Estoy cabreado.

– ¿Conmigo? – pregunta serio – ¿Hasta cuándo vas a evitarme?

– No estoy evitándote.

No han hablado desde lo ocurrido en las duchas con Roi, Agoney le ha ignorado los últimos días y no es porque esté enfadado, lo que siente es diferente. Es verle y recordar toda la situación, algo que no contemplaba, porque no debería haber ocurrido.

– Ago-

– No estoy enojado – le interrumpe – No me preparé para la situación, pensé que llegarías antes y me afectó un poco... No he tenidos días buenos después de eso.

Ricky asiente, siente que se le comprime el pecho cuando le escucha hablar de esa manera, ¿Cómo puede pensar en prepararse para afrontar ese tipo de situaciones? Si es que no existe forma de hacer algo semejante. Aunque quizás, cuando es algo que has presenciado más de una vez, demasiadas veces en tantos años, encuentras una manera para que no te afecte demasiado, de hacerte inmune al sufrimiento ajeno.

Tal vez es el caso de Agoney, pero definitivamente no es el suyo, porque él lleva años en ese trabajo y aún siente impotencia ante los diferentes escenarios que puede encontrarse. Los primeros años fueron los peores, porque era alguien completamente inexperto en el sistema penitenciario, que llegó con una idea lo más similar a la real que su cabeza le permitió y que se encontró con un mundo mucho peor.

– Aunque lo intente, no siempre puedo ayudar a todos – le recuerda Ricky.

– Lo sé, yo sé eso perfectamente – ríe por lo bajo.

– Agoney...

– Perdona, eso estuvo demás – reconoce dejando el último libro, arrepintiéndose de lo que ha dicho – Lo siento, yo también, mejor que nadie, sé lo mucho que haces.

Ricky le dedica una mirada que dice mil cosas a la vez, ambos entienden sus palabras, ambos saben lo que cada uno ha hecho por el otro, y eso es suficiente para olvidar lo que ocurrió hace días con Roi. Tuvieron la intención, pero no pudieron evitarlo, y como el guardia ha dicho, no pueden ayudar a todos, porque hay situaciones que están fuera de sus manos.

– No me has dicho por qué estás cabreado – comenta Ricky.

– Néstor ha hecho una putada.

– ¿De qué hablas?

– Le pidió a uno de los guardias que le plantara gramos de coca a Raoul durante la requisa – vuelve al escritorio principal y el de ojos claros sigue sus pasos – Le pedí que no se metiera con él y evidentemente se lo pasó por los huevos.

– ¿Qué hiciste? – pregunta rápido – Porque he visto al rubio por aquí, claramente no está en aislamiento.

– Le dije a Iván que la coca era mía.

Detrás de ti - RagoneyWhere stories live. Discover now